La marcha ha partido a las 19.00 de la plazoleta en la que Iñigo Cabacas recibió el pelotazo que acabó con su vida y ha recorrido el centro de Bilbo para acabar ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.
«Iñigo Cabacas, gogoan zaitugu» y «Policía asesina» han sido algunos de los lemas que han coreado los participantes en la manifestación, que ha estado encabezada por Manu y Fina, el padre y la madre del joven aficionado del Athletic.
En un manifiesto difundido días atrás, la plataforma recordaba que «han pasado cuatro años y medio desde que el joven Iñigo Cabacas fuera asesinado a consecuencia del impacto de una pelota lanzada por la Ertzaintza». Destacaban «desde el principio, desde la plataforma, la familia y los amigos, hemos venido denunciando la actitud del poder judicial ante las peticiones realizadas por la defensa» porque «han alargado el proceso sin intención alguna de identificar a los responsables del caso».
Indicaba la plataforma, asimismo, que la familia «ha solicitado una y otra vez la imputación de diferentes ertzainas, entre ellos el del responsable ‘Ugarteko’, que ordenó ‘cargar con todo’, a pesar de que estaba claro que en el callejón no había incidente alguno».
Por otra parte, señalaban que «se han conocido informaciones nuevas y la defensa ha solicitado volver a tomarles declaración», pero, según denunció la plataforma, «no ha habido respuesta a estas peticiones, y, sin embargo, el Juzgado de Instrucción tiene que decidir que hacer con el caso antes del 6 de diciembre».
En el manifiesto, la plataforma alertaba del «grave riesgo» en el que se encuentra el caso, y advierten de que «es probable que se archive y que no haya juicio alguno».
En ese sentido, mantienen que «el asesinato de Iñigo no se puede archivar» y consideran que «no se puede cerrar este caso sin responsables policiales ni políticos», porque «eso nos plantaría cara a cara con la impunidad, y refrendaría algo que hemos venido denunciando en múltiples ocasiones, que se están tapando unos a otros, y, lo que es más grave, que nadie va a hacer nada para que esto no se vuelva a repetir».
«No tenemos ninguna prohibición del uso de pelotas de goma, no tenemos ningún responsable de la muerte de Iñigo, así que ¿quién nos asegura que esto no va a volver a ocurrir?», se preguntan, para insistir en que «en los próximos días el juzgado de instrucción decidirá si seguir adelante con el caso, y celebrar juicio, o archivarlo, y tenemos miedo, porque nos tememos lo peor».