La consellera de Presidencia de la Generalitat, Neus Munté, ha señalado que la decisión del Tribunal Constitucional (TC) de anular una resolución parlamentaria con la voluntad de celebrar el referéndum «no altera en nada» la «voluntad inequívoca» del Govern de convocarlo.

Tras la reunión del Govern, Munté ha salido al paso de la decisión, adoptada por unanimidad por el TC, de anular la resolución aprobada en otoño por el Parlament, con los votos de Junts pel Sí y la CUP, en la que se planteaba la celebración de un referéndum como muy tarde en septiembre de 2017.

«Esto no altera en nada nuestra voluntad inequívoca de continuar trabajando para poder celebrar un referéndum en 2017», ha remarcado Munté, que ha recordado que esta voluntad viene «reforzada por una mayoría parlamentaria en el Parlament y de una mayoría social en favor de un referéndum».

Para la consellera «no es ninguna sorpresa» esta decisión del TC ni la «celeridad extraordinaria» con la que la ha tomado, justo después de «una semana tan intensa como la pasada», en la que tuvo lugar el juicio por la consulta soberanista del 9N de 2014.

También ha defendido que en el Parlament «se trabaje y se lleven a cabo diferentes acciones» para poder materializar el referéndum en los próximos meses, y ha señalado que, por ahora, no se prevé que la decisión del TC acelere la convocatoria. «Nos mantenemos con rigor dentro de un calendario al que hemos dado plena transparencia», que es el de celebrar el referéndum antes de que acabe setiembre y hacerlo tras pactarlo con el Estado si es posible, ha recordado.

Sobre este pacto con el Estado, Munté ha insistido en que el Govern tiene «la mano tendida al diálogo, pero no con un plazo ilimitado» de espera, aunque no ha detallado si se ha fijado una fecha para dejar de intentar pactar un referéndum con el Estado antes de decidir convocarlo unilateralmente.

Preguntada por el hecho de que la CUP haya avisado de que será necesaria la desobediencia para celebrar el referéndum, Munté ha replicado que el Govern actuará en todo momento «con obediencia y lealtad al Parlament: Obediencia toda a la legalidad catalana y a los retos y mandatos que surgen del Parlament».