Por su parte, la Liga de Fútbol Profesional pide para Archanco y sus directivos un total de 13 años, cuatro años para los futbolistas del Betis y Maquírriain, y para Zabaleta y su gestora un año. La entidad que preside Tebas exonera a Vizcay y no le acusa de nada.

En un auto fechado el pasado martes 14 de febrero, el juez Fermín Otamendi hizo oficial el cierre de la instrucción de la pieza principal del caso Osasuna con un escrito en el que considera que, de las 29 personas investigadas durante el procedimiento, hay indicios para juzgar a 18 de ellas por apropiación indebida, delito societario, falsedad contable, falsificación documental y corrupción deportiva.

En su escrito de acusación, la Fiscalía pide 11 años y 11 meses de prisión para los exdirectivos Juan Pascual, José Manuel Purroy y Sancho Bandrés, mientras que para los exfutbolistas de Betis Antonio Amaya, Jordi Figueras y Xavi Torres solicita dos años de prisión y 1,9 millones de euros de multa.

El Ministerio Fiscal pide para Vizcay, que destapó el caso tras una confesión a la Liga de Fútbol Profesional en enero de 2015, 14 años y 4 meses de cárcel por delitos de apropiación indebida, falsedad contable y documental, y corrupción deportiva, así como una multa de 1,9 millones de euros.

Para Txuma Peralta solicita 12 años y seis meses, y multa de 1,9 millones de euros por delitos de apropiación indebida, falsedad contable y corrupción deportiva, y para Miguel Archanco 12 años y cinco meses y multa de 1,9 millones de euros.

Estas son las penas más altas del caso, que además tiene como acusados al actual gerente de Osasuna, Ángel Ardanaz, a quien el fiscal pide 14 meses de prisión por un delito de falsedad documental.

Por su parte, la Liga de Fútbol Profesional, acusación particular en el proceso, no acusa a Vizcay de nada y pide para Archanco y su junta 13 años, cuatro para Maquírrian y los exjugadores del Betis, y un año para la junta gestora.

El fiscal también ha solicitado penas de 18 meses de prisión para la agente inmobiliaria Cristina Valencia, dos años de cárcel y una multa de 1,9 millones de multa para el exdirector de la Fundación Osasuna Diego Maquírriain por amaños, y 23 meses para los que fueran miembros de la junta gestora Javier Zabaleta, Luis Ibero, Ángel Larrea, Jesús Dronda y Pedro Zudaire por falsedad documental.

El Juzgado de Instrucción número 2 de Iruñea acusó a 18 de los 29 investigados una vez finalizada la investigación a mediados de febrero, cuando decidió archivar la acusación respecto a los futbolistas Patxi Puñal, Damià Abella, Sergio García y Jorge Molina, así como del actual entrenador de Osasuna, Petar Vasiljevic.

El magistrado también decretó el sobreseimiento de la causa respecto de los exdirectivos José Luis Roldán y Manolo Ganuza, del exdirector general de Osasuna José Gómez, el excontable Tomás López, el exmiembro de la junta gestora Marino Zulet y del auditor Adolfo Suárez.

Fermín Otamendi, titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Iruñea, cifró en 2,2 millones de euros el dinero extraído sin justificación de las cuentas del club rojillo, que no está imputado como persona jurídica.

Sobre la compra de partidos, el juez estimó que había indicios de que exmandatarios de Osasuna pagaron a tres jugadores del Betis, Antonio Amaya, Jordi Figueras y Xavi Torres, 650.000 euros en metálico, 400.000 para que ganaran al Valladolid y 250.000 para que perdieran con el club rojillo en los dos últimos partidos de la temporada 2013/14.