El Ejército de EEUU ha llevado a cabo un ataque con misiles de crucero contra una base militar ubicada en la provincia siria de Homs, según ha confirmado el presidente estadounidense Donald Trump. El ataque ya ha recibido el apoyo de Arabia Saudí o Israel. «Una de nuestras bases aéreas en la región central ha sido objetivo de un ataque con misiles por parte de Estados Unidos, causando bajas», han indicado fuentes sirias a Reuters.
Fuentes militares citadas por la cadena han detallado que en total han sido lanzados al menos 50 misiles Tomahawk desde buques de guerra situados en el mar Mediterráneo contra la base de Ash Shairat. Estas fuentes han indicado que el objetivo eran los aviones que se encontraban estacionados en la base, así como su pista de despegue.
El ataque parece ser la respuesta de EEUU al ataque químico del martes, que la comunidad internacional ha achacado al Gobierno de Bashar al Assad y que se saldó con cerca de un centenar de muertos.
Es la primera vez que la Casa Blanca ordena una acción militar contra las fuerzas gubernamentales en Siria.
Trump confesó el miércoles que este ataque químico había «cambiado» su actitud hacia el conflicto armado en la nación árabe, así como en relación al presidente sirio. El líder norteamericano deslizó la posible adopción de medidas, aunque evitó entrar en detalles: «Ya lo veréis».
Sin embargo, el ministro de Exteriores sirio, Walid al Moalem, insistió ayer en que el Gobierno sirio no llevó a cabo el supuesto ataque químico en Jan Sheijun, y denunció que los grupos terroristas presentes en el país han estado almacenando este tipo de armamento en zonas urbanas.
En una rueda de prensa en Damasco, Al Moalem explicó que el primer bombardeo aéreo que realizó el martes la aviación siria en Jan Sheijun fue sobre un depósito de armas del Frente Fatá al Sham, el antiguo Frente al Nusra, en el que había armas químicas.