El pacto, firmado en Madrid por el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, y el consejero autonómico de Hacienda, Pedro Azpiazu, cierra «diez años de incertidumbre financiera», según ha destacado el consejero jeltzale en una comparecencia en Gasteiz.
Entre los aspectos clave del acuerdo sobre el Cupo –la suma que la CAV paga al Estado español por las competencias no transferidas–, se encuentra la fijación de la cuantía a devolver por parte del Estado derivada de las discrepancias en el cálculo del Cupo entre los años 2007-2016 y las políticas activas de empleo. El importe de dicha cuantía se ha fijado en 1.400 millones de euros.
Además, se ha fijado un Cupo provisional para 2017 de 1.300 millones de euros, que tras descontar los 344 millones de políticas activas de empleo, se quedará en 956 millones a pagar.
En opinión de Azpiazu, que se ha confesado «enormemente satisfecho», esto no supone una «cesión» por parte del Gobierno de Iñigo Urkullu, sino que las cifras pactadas ahora surgen de «una lectura conjunta» y de «hacer los cálculos como la ley manda».
El texto acordado entre ambos gobiernos será aprobado en una Comisión Mixta del Concierto Económico a celebrar en la segunda quincena de mayo. Azpiazu ha destacado que el acuerdo supone entrar en «un periodo de estabilidad financiera» tras «normalizar y regularizar» las relaciones.
Azpiazu ha explicado además que ese «Cupo provisional» de 956 millones será «la primera piedra» de la Ley Quinquenal 2017-2021, que deberá acordarse en Comisión Mixta del Concierto Económico y aprobarse después en las Cortes Generales; y servirá de referencia para los próximos cinco años.
Aplauso de Urkullu
El lehendakari Iñigo Urkullu ha valorado hoy que el acuerdo sobre el Cupo que su Gobierno ha alcanzado con el Ejecutivo español «va a suponer estabilidad, inversión, crecimiento y empleo para Euskadi».
El lehendakari ha recurrido a las redes sociales para felicitarse por este acuerdo, que «garantiza la estabilidad y la certidumbre en las relaciones financieras con el Estado» y que además «cierra un periodo de desavenencias que lastraba las relaciones bilaterales desde 2007».
Urkullu ha calificado como «un muy buen acuerdo» el alcanzado con el Gobierno de Mariano Rajoy en este tema «porque la 'paz fiscal' durante 15 años va a suponer estabilidad, inversión, crecimiento y empleo».
Satisfacción de Montoro con el PNV
El ministro español de Hacienda, Cristóbal Montoro, también ha expresado su satisfacción por el acuerdo que permitirá al Gobierno español aprobar sus presupuestos gracias al apoyo del PNV.
Montoro ha señalado a los medios de comunicación tras finalizar su intervención en el pleno presupuestarios, que el Gobierno tenía que cumplir con un programa político de forma inexcusable porque la Ley del Cupo estaba vencida y «vivíamos una prórroga que ha sido la más larga del Concierto Económico».
Ha insistido en que la actualización del Cupo había que llevarla a cabo en este primer ejercicio de la legislatura ya que es un asunto que afecta a una ley quinquenal que está prorrogada y ha recordado que la crisis económica había impedido esta negociación.
También ha señalado que el Gobierno español tiene reuniones programadas con el Ejecutivo navarro para hablar de su régimen foral y de su propio tratamiento fiscal por lo que «nadie se tiene que sentir agraviado».