«La campaña de incitación está basada en mentiras que ya han alcanzado el nivel de completas invenciones», ha asegurado el Ministerio de Asuntos Exteriores qatarí.
El Gobierno qatarí ha dicho que, como miembro del Consejo de Cooperación del Golfo, está comprometido con el cumplimiento del tratado de este grupo y respeta la soberanía de otros países y no quiere interferir en los asuntos de otros países.
El Ejecutivo de Doha ha considerado que la decisión de romper relaciones anunciada por Arabia Saudí, Emiratos Arabes Unidos, Bahréin y Egipto –posteriormente se ha sumado Yemen– no tiene justificación posible.
«Las medidas están injustificadas y se basan en denuncias y acusaciones que, en realidad, no tienen base», ha afirmado el Ministerio de Asuntos Exteriores qatarí.
El Gobierno qatarí ha hecho hincapié en que la ruptura de las relaciones «no afectará a las vidas normales de los ciudadanos y los residentes».