Tras la decisión de la Coordinadora de Catalunya en Comú, la formación de Ada Colau, de dar apoyo al 1-O, pero no como un referéndum, decidieron someter a consulta los días 12, 13 y 14 de septiembre sus inscritos que la han respaldado con un 44% de participación.
Un total de 3.485 inscritos han participado en la consulta que preguntaba si Catalunya en Comú tiene que participar en la movilización del 1-O' y 2.053 han votado a favor, 1.404 han votado en contra y se ha emitido un voto nulo.
Con este resultado, los comunes hacen un llamamiento a la participación, sin decantarse ni por el sí ni por el no dadas las diferentes sensibilidades dentro del partido, y harán una campaña propia aunque no participarán en ninguno de los actos oficiales programados por los independentistas.
Alamany ha admitido que el 1 de octubre, suspendido por el Constitucional, «no tendrá la normalidad democrática que desearíamos», pero ha defendido esta llamada a la participación frente a la «ola represiva» de un Gobierno que practica la «estrategia del miedo», «se escuda tras los tribunales y las querellas» y adolece de «sordera» ante las demandas catalanas.
«No podemos doblegarnos»
Los comunes harán campaña para movilizar a ese «80 % de los catalanes favorables» al derecho a decidir, según algunas encuestas, con actos propios que todavía no han cerrado, pero sin entrar en la política de bloques y sin participar en ninguno de los eventos que han organizado los partidos independentistas.
De hecho, ha avanzado que las caras más visibles del partido votarán en la movilización «legítima en forma de consulta» que ha convocado el Govern para el 1 de octubre.
La portavoz de los comunes, por otro lado, se ha mostrado muy crítica con el PSOE y con el PSC, y les ha instado «a romper su silencio de una vez por todas» para denunciar la "agresión flagrante» del PP a las instituciones catalanas: «Como partido progresista, no se pueden permitir estar callados ni un minuto más», ha opinado.
Anticapitalistas por el sí
Anticapitalistes, una de las corrientes internas de Podem, ha llamado a participar en el 1-O para que el resultado sea un mandato claro de la sociedad catalana, y ha defendido votar sí «porque representa la ruptura con el status quo y abre camino a la construcción de una república catalana».
En un comunicado este viernes, ha defendido que la república catalana puede ser un «punto de encuentro estratégico entre independentistas y federalistas», y ha avisado de que después del 1-O habrá que defender el resultado para que pueda ser vinculante y abrir así un proceso constituyente donde la ciudadanía pueda decidir.
Este sector ha apostado por que Catalunya en Comú y Podem se impliquen activamente en la campaña del 1-O y en «las acciones de desobediencia y movilización contra los intentos del Estado para pararlo», por lo que han promovido votar sí en las consultas de ambas formaciones para definir su posición ante el referéndum.