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WASHINGTON

Trump, de nuevo frente a sus agencias de inteligencia

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a enfrentarse a sus agencias de inteligencia al defender la negativa de Moscú sobre la injerencia rusa en las elecciones de 2016, aunque posteriormente respaldó el informe de la inteligencia estadounidense que lo confirmaba, una ambigüedad que levantó de nuevo críticas en Washington.

«Se trata de ingenuidad, ignorancia o miedo (...) Creo que el presidente está intimidado (por el presidente ruso) Putin», aseguró John Brennan, exdirector de la CIA (2013-2017) que dejó el cargo tras la llegada de Trump a la Casa Blanca. Trump afirmó el sábado que cree a Putin cuando dijo que no se entrometió en las elecciones estadounidense, lo que dejaba en evidencia el informe de la inteligencia de enero en el que se asegura que Moscú trató de interferir en los comicios presidenciales para influir a favor de Trump.

Unas horas después, Mike Pompeo, director de la CIA nombrado por Trump, emitió un comunicado en el que insistía en su respaldo el informe de la inteligencia sobre la injerencia electoral de Rusia en 2016, y agregó que su opinión al respecto no había cambiado.

Brennan consideró desconcertante la «deferencia» expresada por Trump ante el líder ruso. Trump «debería sentir vergüenza» de haber atacado a los servicios de inteligencia, afirmó Brennan. El presidente acusó a Brenan de ser un «vendido», una acusación que el exdirector de la CIA consideró «un honor, viendo la fuente de la crítica».

Tras el revuelo generado, el mandatario estadounidense trató de recular.

«Lo que dije es que creía que (Putin) lo cree (...) Yo creo que él cree que ni él ni Rusia interfirieron en las elecciones», sostuvo. «Sobre si yo le creo o no, yo estoy con nuestra agencia. Yo creo en la información de nuestras agencias», añadió.

Uno de los responsables del informe, el exdirector nacional de Inteligencia, James Clapper, opinó que «los rusos no albergan buenas intenciones hacia EEUU, y no debería haber ninguna ilusión o ambigüedad sobre ello. Y nuestro presidente alimenta esa ambigüedad».

El estupor por los comentarios de Trump se extiende al seno del partido republicano. «No hay nada de ‘Estados Unidos primero’ acerca de confiar más en la palabra de un coronel de la KGB que en la de la inteligencia estadounidense. Vladimir Putin no defiende los intereses de EEUU», subrayó el senador John McCain. «A ver cuándo se dan cuenta los ‘haters’ y los idiotas de ahí fuera que tener una buena relación con Rusia es bueno, no malo. Siempre están jugando a hacer política. Eso es malo para nuestro país. ¡Quiero resolver la situación en Corea del Norte, en Siria, en Ucrania, el terrorismo y Rusia puede ayudar enormemente!», se defendió Trump.

Por otra parte, el presidente estadounidense, que llegó ayer a Manila en su gira por Asia, volvió a atacar al líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, y esta vez con un nivel (aún) más bajo: «¿Por qué me Kim Jong-un me insulta llamándome viejo? Yo NUNCA le diría que es gordo y bajo. Oh, en fin, con lo que intento ser su amigo - ¡y quizás algún día pueda suceder!». El líder norcoreano le había descrito como un «viejo lunático», obsesionado por provocar «una guerra nuclear».

 

China y Vietnam anuncian avances en su contencioso marítimo

Tras su paso por Vietnam, Trump se ofreció a servir de intermediario en la disputa territorial en el mar de China Meridional entre China y Vietnam. «Si puedo ayudar a mediar o arbitrar, hágamelo saber», dijo al comienzo de una reunión en Hanoi con el presidente vietnamita, Tran Dai Quang. Pero ambas partes presentaron un avance en el contencioso tras una entrevista entre el presidente chino, Xi Jinping, y el líder del Partido Comunista de Vietnam, Nguyen Phu Trong. Ambas partes han alcanzado «un importante consenso para gestionar las cuestiones marítimas de forma apropiada» y esforzarse conjuntamente «en mantener la paz y la estabilidad en el Mar de China Meridional», señaló la agencia China Nueva. Pekín reivindica la mayoría de la zona, donde Vietnam, Filipinas, Malasia y Brueni también tienen sus reivindicaciones. China ha reforzado su control en varias islas con la construcción de instalaciones, sobre todo militares. Este mar estratégico, por el que transitan diariamente 5.000 millones de dólares en mercancías puede contener además grandes reservas de gas y petróleo. «El mar de China Meridional es mejor no tocarlo, nadie se puede permitir ir a una guerra», afirmó el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, en la inauguración de la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático que se celebra en Manila y a la que también asiste Trump.GARA