Desde EH Bildu han querido «dejar al desnudo las mentiras que en las últimas semanas han realizado diferentes miembros de UPN, y para ello, presentamos una serie de datos reales y contrastables que confirman que el Gobierno del cambio resulta más austero en el gasto». De acuerdo con sus datos, el nuevo equipo de Gobierno, y tras la reestructuración, sigue costando 263.240 euros menos al año que el equipo de Gobierno de UPN.

En concreto, han desgranado que el coste del equipo de Gobierno de UPN era de «un total de 2.657.788,89 euros. Entre sueldos de los concejales de equipo de Gobierno, sueldos de los cargos de libre designación y las dietas que percibían concejales del equipo de gobierno y cargos de libre designación por asistencia a los Consejos de Administración y Juntas de las Sociedades Municipales (ANIMSA, Mercairuña y Comiruña)». En cambio, «el coste de equipo de gobierno del cambio es de 2.394.548,68 euros, contabilizando sueldos de concejales del equipo de gobierno y de los cargos de libre designación. Ya que actualmente no se cobran dietas».

Además, han tachado de «absolutamente falso que el número de cargos de libre designación sea ahora superior a cuando UPN gobernaba. UPN tenía 43 cargos de libre designación y el actual equipo de gobierno cuenta con 37 puestos. Por tanto, hay seis cargos menos de libre designación».

También han puesto de manifiesto que «desde EH Bildu y el Gobierno del cambio gobernamos desde una posición ética muy diferente en lo referente a los sueldos y dietas públicas». En ese sentido, han recordado que las primeras medidas que adoptaron nada más conformar el nuevo gobierno municipal fueron las siguientes:

-Bajada de sueldo: El anterior alcalde de UPN, Enrique Maya, «cobraba 83.232,79 euros anuales (sueldo más dietas) y el actual, Joseba Asiron, cobra 62.692,14 euros anuales. De la comparativa resulta una rebaja del 24,7%». Asimismo, las y los concejales delegados «cobraban la pasada legislatura 51.160,90 euros más una media de 2.400 euros anuales por dietas de Sociedades Municipales, es decir, 53.560´9 euros anuales. Los actuales concejales y concejalas delegadas cobran 49.088,90 euros, lo que implica una rebaja del 8,4%».

-Eliminar o renunciar a las dietas de las sociedades municipales (Animsa, Comiruña, Mercairuña y jurados de contratación de personal). Al respecto, han señalado que «ciertamente, la palabra clave a la que prestar atención para entender una gran parte de la falsedad de las cifras aportadas por UPN son las dietas que todavía intentan ocultar».

-El alcalde y concejalas y concejales de UPN «cobraban más sueldo que los actuales y, además, cobraban cuantiosas dietas: 39.081,92 euros solo en el año 2013. Durante los cuatro años de la legislatura, esta cifra ascendió a 138.605,30 euros, cuantía que incluye no sólo las dietas de los ediles sino también las que se repartían sus cargos de libre designación».

-Finalmente, han destacado que «existe al menos un concejal de UPN, Fermín Alonso, que llegó a cobrar de jurados de contratación de personal sin haber acudido a los mismos y ni siquiera se digna a devolver lo ingresado, aunque no sea una gran cuantía».

A estas cuestiones, se sumarían «las insultantes dietas de la CAN donde cobraba 3.400 euros en una sola tarde, en dos sesiones ininterrumpidas de 1.700 euros cada una (hasta 12.000 euros) y en las que no había ni tan siquiera orden del día (tal y como él mismo declaró ante la jueza). Una verdadera vergüenza a la que también se sumaba Ana Elizalde, anterior concejala delegada de Hacienda (hasta 5.000 euros), y que tuvieron que devolver cuando se conoció semejante escándalo».

EH Bildu considera que estos datos «evidencian la diferencia de estilo político y de decencia ética en la gestión de los sueldos y dietas públicas entre el actual Gobierno municipal del cambio y los anteriores equipos de UPN. Y es que ha tenido que llegar un gobierno del cambio a Iruñea para eliminar todas las dietas de este Ayuntamiento. No cabe duda de que además de resultar más austero en el gasto, el actual Gobierno tiene un comportamiento más honesto, eficaz y riguroso en la gestión los recursos públicos, en línea con lo que la ciudadanía espera de quienes les representamos».

Recalca que «las falsas afirmaciones pretenden ocultar el buen y solvente trabajo que está realizando este Gobierno del cambio, que con su reestructuración ha ampliado el ámbito de trabajo a aspectos abandonados por UPN, como la vivienda (oficina de vivienda), la visión estratégica (oficina de estrategia), la movilidad, la energía, la participación y el desarrollo comunitario».