En abril de 2016 Aizkorak Zorroztu debuta con un disco de quince canciones y a dos minutos de media por título. No es una situación común, ni la portada. Las sospechas se confirman tras la primera escucha: no es una banda habitual, por mucho que el rock sea la base. Su singularidad queda impregnada a la espera de un segundo disco que mantenga el proyecto y la estimable locura musical. Y llega en estos días “Arkitekto mental baten paranoia kronika”, que mantiene el nervio y la tensión narrativa de su debut, y a la que se le añade funk inmediato desmadrado y cabalmente caótico. Cambia, en parte, el sonido, pero nada que no sea Aizkorak Zorroztu y su rebelde imaginación.

No extraña, por tanto, que estuviesen viendo en Kafe Antzokia de Bilbo a Rukula y su tributo a M-ak. Como también es habitual verles a Ander Pikowsky y los hermanos Reparaz, Mikel y Alain, en diversos conciertos, aunque, por lo general, especiales. Esos que no ofrecen lugares frecuentados.

No obstante, y en un plano general, cuentan con gustos tan universales como llamativos, de B’52 (ritmos y gritos muy de Ander) a Beatles (Alain), de Belako a Kase O, de Yellow Big Machine a Mourn, de Eskorbuto a Jack White, de Negu Gorriak (pasión de Ander) a James Brown, presente con su funk caliente en este disco.

«En mi casa –relata Mikel– siempre se ha escuchado mucha música. Un día le cogí el walkman a mi hermano y tenía puesto en una cinta el primer disco de Negu Gorriak. En ese momento se paró el mundo y con el disco de “Azken guda dantza” de Kortatu tenía claro que tenía que montar un grupo».

Mikel y Ander se conocen en los locales de ensayo del Kukutza en el barrio de Rekaldeberri, cada uno con sus grupos (Opium War y Zulo) y desde entonces siempre hemos estado en contacto. Finalmente y tras unos años viviendo en Iruñea, Ander regresa a Bilbo y en 2014 nace una de las formaciones más sugerentes de nuestra escena.

El disco se presenta en Nave 9, al lado del Museo Marítimo, el próximo 3 de febrero junto a Zazkel, también con un buen disco que mostrar, “Ez entzun”. 21.00.

En la primera canción, «Piztia», el ambiente, en un tramo, y al margen del funk, recuerda al primer disco de Santana por los teclados y percusiones. Curioso por la lejanía en el tiempo, aunque ya hemos aprendido que n0 hay barreras con Aizkorak Zorroztu.

“Piztia” fue la última canción que se había compuesto y en un primer momento se iba a quedar fuera porque ya había una selección de temas para el segundo disco. Empezamos a ensayarla para que al menos no se quedase fuera en los directos. En el momento que se compuso estaba escuchando mucho James Brown y Santana. El video de Santana del directo de Woodstock de la canción “Soul Sacrifice” es magia, es trance y es muy salvaje. Es una clara influencia a la hora de componer la parte central del tema. Los riffs de guitarra suplen la ausencia de trompetas a la hora de componerla. En la intro hemos sampleado incluso el grito de James Brown de la canción “Get offa that thing”. El Hammond era necesario en esta canción y Txosk, el teclista de Zazkel, revolucionó la canción con lo que grabó. El solo de trompeta sicodélico y los fraseos estilo Otis Redding, a cargo del trompetista cubano Alayn Rodríguez, fueron los últimos arreglos que se grabaron. Dimos a elegir a Fermin Muguruza entre varios temas para su colaboración a las voces y se quedó con este. Si metes en una batidora todos los temas del disco el resultado sería “Piztia”.

¿Qué ha ocurrido en poco más de un año para que de la corrosión rockera se haya pasado al funk del disco actual y a las aportaciones cubanas? ¿Es quizá un paréntesis? Además se pasa de quince canciones a ocho.

En el primer disco queríamos canciones que sonasen igual en directo y en estudio, además de meter todas las canciones que estaban compuestas hasta ese momento. Fue un proceso largo en el que nos deshinchamos mucho y para este segundo disco seleccionamos ocho para tener tiempo de grabarlas y poder desarrollarlas en estudio añadiendo más instrumentos. Empecé a componer en compases menos habituales como en 5x4, 7x4 ... y esto ya supuso un giro importante en ritmos y estructuras. El funk, los ritmos latinos... siempre ha sido algo que he querido añadir y este disco nos ha brindado esa oportunidad. Cuando se estaba grabando el primer disco ya estaban compuestas varios de los temas del segundo. El giro musical ya se estaba gestando y lo mismo está ocurriendo de cara al tercero. Cada disco, cada canción es una oportunidad para hacer algo diferente y la música te permite explorar, jugar y moverte por estilos diferentes, añadir más instrumentos, apoyarte en más músicos y hacer que tus canciones crezcan. Crear sin límites y sin filtros es muy adictivo.

Es un disco con color funk en algunas composiciones, pero se pierde el rock ni la pulsión frenética y la rabia. La fusión puede estar en ese irrintzi que nos lleva a una de las canciones más conseguidas del disco: «Bakailaoa Pil-pilean»

La rabia y la pulsión frenética es algo innato al grupo. Me gustan mucho los irrintzis. Es una forma increíble de liberar adrenalina. Deberían de sustituir el ommm por el irrintzi en las sesiones de yoga. “Bakalao PIl-pilean” es un homenaje a la comida de casa. Esa indabada, marmitako y bakalao al pil-pil espectacular que prepara tu aita. Ese increíble plato hipercompleto de sopa, garbanzos y carne que prepara la ama [Ander es un apasionado de la cocina]. Cuando uno se emancipa suele perder ese lujo culinario casero, así que con esta canción reivindicamos el bakalao al pil-pil y las viejas recetas de nuestros ancestros como artefactos gastronómicos fundamentales en nuestra dieta musical. Pronto, ya que nosotros somos excelentes cocineros, sacaremos un libro de recetas de cocina inéditas.

«Txarriboda» es otro atracón, esta vez de rock y salsa cubana?

Gran culpable de esta canción es Ricardo Riverón de Havana537. Me pusé en contacto con la comunidad Cuba-Euskadi de Facebook y ellos me pasaron con Ricardo. Con él llegó el tres cubano a esta canción, todo un descubrimiento, también las percusiones de Luis Miguel Arboleda y las trompetas de Alayn Rodríguez. Es una de mis favoritas del disco. Conocer al grupo Havana537 ha supuesto un punto y aparte en este segundo disco. ¡Asssucarrrr!

En el primer disco contaban con invitados y en este sigue la tendencia. Para un grupo que se está dando a conocer conseguir involucrar a Fermin Muguruza tiene mérito, y visitar su casa en Irun.

Grabar un disco y poder compartirlo con más músicos en estudio es un regalo. Fermin Muguruza es una referencia muy importante. Su amplia trayectoria artística audiovisual, musical o en el cómic, además de su incombustible activismo y su ritmo creativo, es un pilar importante en los cimientos de la banda. Todo un impulsor creativo para el grupo. La motivación para seducirle era muy alta así que tuve que ser muy creativo. Todo empezó en El Muga, en una conversación muy profunda. Yo estaba en la barra bebiendo jenjibre ecológico cuando de pronto entró Fermin y de la que pidió mesa para comer, yo me fuí a la mesa de al lado a comer también. De repente se le cayó un tapón de la botella y el destino quiso que tocase mi pie. Recogí el tapón, se lo dí y me dijo: Eskerrik asko!. ¡Y ahí terminó nuestra conversación!.

Un año más tarde le escribí un mail y después de intercambiar varios correos electrónicos nos propuso un día para que viniese a grabar las voces. Lo dio todo en la colaboración. Vino con Jone a la que le estoy muy muy agradecido por toda la ayuda de ese día y terminar en su casa en Irún fue impresionante. Aquello era un templo musical. Toqué la guitarra con la que tocaba en Kortatu… El 4 de noviembre fue más que un regalo. Eskerrik asko Fermin eta Jone. Erraldoiak zarete!

Les gusta vacilar con la música y con los textos, ¿cómo se lleva esto en la vida diaria? ¿Cómo se llega a «Supermistika»?

Los textos de las canciones contienen vacile e ironía para poder soportar el surrealismo tan brutal que nos rodea. La gran estafa del ser humano, su adoctrinamiento barato y la secta del pensamiento positivo se combaten muy bien con el humor. La interpretación que la cultura occidental hace sobre el budismo y toda la cultura hipster y new age son parte inspiradora de la letra de esta canción. El tema está en un 5x4 y un 6x8. Batidora de ritmos imprevistos y movimientos espasmódicos. Por todo esto, si en tu vida el equilibrio quieres encontrar nunca tubérculo con cereal has de mezclar.

También habrá el domingo exposición de obras de Markel Urrutia, excelente diseñador.

Para el diseño del primer disco contamos con una grande, Sara Prieto, magia y genialidad pura. Para este segundo queríamos que todo fuese diferente y Markel Urrutia ha reflejado de manera impresionante el significado de este nuevo disco. Rápido a nivel creativo y muy a gusto con él. Sara y Markel son parte vital en nuestros dos discos. El 3 de febrero se podra disfrutar de los trabajos que ha ido haciendo Markel en estos años. Exposición legendaria de Smoke Signal studio.