Los efectos de la nevada, que comenzó a caer hacia las tres de la madrugada de ayer se hicieron notar en Nafarroa cuando miles de personas se dirigían a los centros de trabajo o de estudio, provocando problemas de tráfico. En Iruñea se acumuló un espesor de 18 centímetros.

Una de las imágenes más comentadas en las redes sociales fue la de una villavesa atascada en la cuesta de Beloso y con los viajeros empujando para tratar de que volviera a retomar su recorrido.

En Iruñea, los problemas se vivieron especialmente en los acceso a la meseta, mientras que en las principales autovías se sucedían los cortes de carretera intermitentemente. Para el mediodía, la situación del tráfico se normalizó, aunque el Gobierno navarro alertó de la posibilidad de que cayese lluvia engelante, la que precipita de forma líquida pero se congela al contacto con el suelo, provocando placas de hielo que son peligrosas para los vehículos.

Un total de trece centros educativos interrumpieron las clases, mientras que el Gobierno navarro destacó que no había habido incidencias reseñables en el ámbito sanitario.

Incidentes leves

Protección Civil atendió 83 incidentes relacionados con la nieve, de los que el 40% fueron golpes de chapa. No hubo heridos.

La nieve llegó a todo el herrialde, de norte al sur, dejando imágenes poco habituales como el cabezo de Castildetierra de la Bardena completamente blanco.

En Iruñea, pudieron verse a esquiadores en zonas de Alde Zaharra como la cuesta de Santo Domingo. Los expertos en este deporte señalaban que «son ganas de joder los esquíes» al ver la escena.

La Policía Foral destinó 120 agentes a atender las incidencias de la nieve y actuaron 126 quitanieves. En otras 111 entidades locales actuaron equipos cedidos por el Gobierno para asegurar la vialidad de las carreteras secundarias. En Iruñea, fueron 220 trabajadores los que bregaron contra la nieve.

Sin embargo, los grupos de la oposición arremetieron contra el Ayuntamiento de Iruñea y el Gobierno navarro ante lo que calificaron de «imprevisión ante la anunciada nevada». UPN habló de «caos circulatorio» y de «ineptitud».