Así lo ha puesto de manifiesto la Mancomunidad con motivo de la celebración del Día Mundial del Agua.

Desde hace ya tres décadas, el Programa Educativo de la Mancomunidad ha desarrollado una oferta que actualmente se centra en los cuatro temas relacionados con los servicios de esta entidad (Agua, Transporte, Residuos, y Parque Fluvial).

El primero de estos programas, el dedicado al Ciclo Integral del Agua, es el más veterano y el que más ha evolucionado desde su puesta en marcha.

A través de las 31 actividades programadas para este curso, alumnos y alumnas aprenden de la mano de la Mancomunidad el ciclo natural y urbano del agua, comprenden la importancia que tiene para la vida de las personas y de todos los seres vivos y asumen la necesidad de cuidar el agua en nuestros hábitos cotidianos.

Los niños y niñas participantes verán en el agua un elemento esencial para el desarrollo sostenible.

Con estos mismos valores, hoy se celebra el Día Mundial del Agua, coordinado por UN-Water, un mecanismo de colaboración de la ONU para temas relacionados con el agua potable en el que participan gobiernos y otras entidades.

Bajo el lema ‘La respuesta está en la naturaleza’, la celebración de este año se centra en explorar cómo la naturaleza puede ayudar a superar los desafíos que plantea el agua en el siglo XXI. La Mancomunidad se suma por tanto a esta celebración con el compromiso de gestionar el agua de forma sostenible, cuidar los ecosistemas y transmitir estos valores a los alumnos y alumnas de Iruñerria desde hace más de 30 años.

Así lo ha señalado en una nota, en la que indica que los niños y niñas de educación infantil, de 3 a 5 años, tienen su primer contacto con el mundo del agua en los Depósitos de Mendillorri. En un entorno mágico, ante un conjunto de enormes arcos que sumergen sus pilares en un espejo limpio y azul, los más pequeños aprenden que el agua es «una amiga a la que conocer y apreciar».

Barrillo, un simpático perro, es el encargado de explicar que el agua está en todas partes y tiene su propio camino: el ciclo natural. Para los más pequeños este viaje empieza por tanto en unos misteriosos depósitos construidos en 1895, a través de la música y de sus sentidos.

Este es el primer paso de un viaje que abarca sus diferentes etapas: el agua en la naturaleza, las fuentes de abastecimiento, potabilización, consumo, depuración y finalmente, el regreso del agua al río.

A través de las 31 actividades programadas y diferenciadas en función de los tres niveles educativos (infantil, primaria y secundaria) el alumnado comprenderá por qué es tan importante cuidar el agua y el estado de los ecosistemas.