Los concentrados han señalado que algunos partidos políticos, con el alcalde Aburto a la cabeza, grandes multinacionales, cadenas o la dirección de Bilbaodendak «aprovechan cualquier acontecimiento para impulsar un modelo de ciudad y de comercio que ni deseamos ni nos beneficia a los que vivimos en ella. En esta ocasión nuevamente han aprovechado para unir turismo y apertura de comercios en festivos, intentando lanzar mensajes falsos y con intenciones partidistas en los medios. Promover cultura vasca no es abrir comercios en festivos».



Han añadido que «queremos unas ciudades y unos barrios vivos, donde las y los que vivimos y trabajamos en ellas podamos disfrutar de nuestro tiempo de ocio sin impulsar el consumismo y manteniendo un equilibrio».

Los convocantes de esta protesta han abogado por «la supervivencia del pequeño comercio» y por unas condiciones laborales que no «condenen a la precariedad» a los trabajadores y trabajadoras.