«El ejercicio del derecho a decidir será clave en el ciclo que viene, porque es un instrumento fundamental para garantizar la convivencia a largo plazo y porque, teniendo como base y único límite la voluntad democrática de la ciudadanía, posibilita dar cauce a todas las opciones, sin exclusiones». Así lo cree Gure Esku Dago, que ha hecho hincapié en la necesidad de «conseguir que lo que hasta ahora ha sido motivo de conflicto político se convierta en un reto democrático, debatiendo y gestionando con total normalidad las diferentes opciones políticas».
«No en vano, ese futuro que queremos construir juntos debe estar basado en la democracia, la libertad y la defensa de los derechos civiles y políticos. Y eso es, precisamente, lo que manifestaremos enlazando nuestras manos en la cadena humana del 10 de junio: que queremos una nueva democracia para construir una sociedad más justa, que este pueblo no está dispuesto a dar un paso atrás en sus objetivos y que tenemos toda la determinación para seguir adelante. No solo eso; la movilización también mostrará que queremos construir el futuro juntos, porque solo así podremos superar los obstáculos y llegar lejos», han señalado Angel Oiarbide y Jone Amonarriz en una acto celebrado junto al Parlamento de Gasteiz.
Allí han advertido de que «estamos en un cruce de caminos». «Por un lado, llegan vientos retrógrados desde el sur y, por otro lado, la posibilidad de abrir un nuevo ciclo basado en la democracia. En la cadena humana mostraremos cuál es el camino elegido. Estamos preparadas y preparados para afrontar ese reto y nuestra determinación para trabajar hasta llegar a decidir es total. Creemos en un futuro mejor y vamos a marcar un nuevo hito para abrir ese nuevo ciclo», han apuntado, y han apostado por «superar las barreras y obstáculos existentes en el marco jurídico-político actual».
«La ciudadanía se está dando cuenta de la capacidad que tiene de promover cambios en la sociedad. En los últimos meses, miles y miles de ciudadanos y ciudadanas han salido a las calles a reivindicar diferentes causas. Una vez más, estamos demostrando nuestra capacidad colectiva. Y, una vez más, estamos dejando patente que en la raíz de todas esas reivindicaciones está la capacidad de decidir. Nos une la reivindicación de querer decidir aquí, en Euskal Herria. Por ello, la cadena humana del 10 de junio quiere ser el punto de encuentro de todas esas reivindicaciones. Y hacemos un llamamiento a los agentes políticos y civiles de este pueblo a que participen y muestren sus razones para querer decidir en la cadena humana», han manifestado.