En un mensaje urgente publicado en Twitter, el diario oficial 'Cubadebate' ha señalado que el avión ha caído «poco después de despegar de la pista». El diario 'Granma' ha informado de que al menos tres personas han sido trasladadas a un hospital en estado crítico. De momento, se desconocen más detalles sobre el balance de víctimas.

Entre los pasajeros había cinco niños, uno de ellos un bebé menor de 2 años. Desde Cuba aún no han informado sobre la nacionalidad de los pasajeros, ni los nombres.

Según apunta France Press citando fuentes oficiales, en el avión viajaban 113 personas, 104 pasajeros y 6 miembros de la tripulación. 110 han fallecido.

Por su parte, la televisión estatal Cuba TV ha explicado que el avión siniestrado realizaba un vuelo interno y que tenía como destino la provincia de Holguín, en el este de la isla. El mismo medio ha señalado que la aeronave es un avión de la empresa Blue Panorama «arrendado por Cubana de Aviación».

El aparato se ha desplomado sobre una zona agrícola conocida como Rancho Boyeros que rodea al aeródromo capitalino.

El nuevo presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, se ha trasladado inmediatamente al aeropuerto, acompañado de varios miembros de su Gobierno. Allí ha afirmado que la respuesta de las fuerzas sanitarias y de salvamento al accidente «ha sido inmediata», y ha adelantado que las noticias sobre supervivientes «no son nada halagüeñas».

«Se siguieron de inmediato las acciones que están previstas en los planes para eventos de este tipo. Se ha organizado todo, se extinguió el fuego, se están identificando los restos y ya se creó una comisión para investigar el hecho», ha señalado el mandatario a la televisión estatal cubana desde el lugar del siniestro.

Díaz-Canel ha insistido en que «se van a hacer todas las investigaciones» para esclarecer las causas del accidente.