El ‘Profe’ Luis Bonini decía que Eduardo Berizzo tenía «la capacidad de no volverse loco». Seguramente un guiño a ese ‘Toto’ diferenciado de Marcelo Bielsa y que persigue al técnico de Cruz Alta sin ningún pesar suyo. Pero si hay voces que conocen de cerca al nuevo entrenador del Athletic esas están en Vigo, donde el argentino dejó huella y poso tras dos temporadas en el Celta. Y como Bonini, Tomás Alonso, conocido y veterano periodista deportivo de la Televisión Gallega en la ciudad olívica, confirma que estamos frente a un «Bielsa moderno... Bielsa 2.0 le llamábamos por aquí, aunque ya será 4.0. No están tan loco, es un tío moderno, de otra generación».

Como el propio Berizzo dejó patente en su presentación en Bilbo, Alonso constata que «él nunca renunció de esa etiqueta bielsista, no reniega, pero ‘soy Berizzo’ y tiene su toque de distinción». Eso sí, adelanta, «es intransigente en muchas cosas y lo que exige a los jugadores es mucho compromiso, mucha entrega» y en el Celta se la dieron. Cabría esperar, por tanto, que el nuevo técnico rojiblanco aterriza en un terreno abonado como es el Athletic y su reciente experiencia ‘religiosa’ con Bielsa. «Yo creo que en el Sevilla por ahí vinieron los errores, un equipo con más figuras que lo que era el Celta, donde no era lo mismo decirle a Nolito y Aspas que persionaran tan arriba. Él necesita compromiso, que los jugadores se vacíen y aquí los jugadores estuvieron con él desde el primer día», explica. ¿Les suena?

Un nivel de exigencia y entrega que se traduce sobre el césped en un fútbol donde su equipo «tiene que tener el balón, es alguien que va a ganar a todos los campos, sin miedo, sin especular, y que va a dar la oportunidad a chavales». Un equipo que arriba se distinga por «la velocidad, rapidez, presión... Eso le vuelve loco... Robar y atacar, robar y atacar...». Quizá por eso, desde la distancia, Tomás Alonso otea problemas para la titularidad del goleador Aritz Aduriz, porque Berizzo «exige presionar y pelear los noventa minutos y a él no le veo. Veremos cómo encaja un jugador de esa edad y jerarquía en sus planes, donde tienes que vaciarte durante 80 minutos e igual para nada».

Su apuesta por el 4-3-3

Las líneas maestras del fútbol de Berizzo parecen claras. A partir de ahí, qué mimbres necesita. «Le gustan los laterales de largo recorrido, que tengan mucha presencia en ataque. Hay una jugada que en el Celta la vimos millones de veces, llegada hasta el fondo, centro muy pasado y dejada atrás para el que entra y remata. Eso con Orellana, Nolito y Aspas lo vimos muchísimo. Y luego en ataque tres hombres pero en un esquema muy maleable, donde alguno puede retrasarse más dependiendo de la situación», detalla. Berizzo tiene en el 4-3-3 su diseño de cabecera, frente al 4-2-3-1 habitual en el Athletic de los últimos años. «Le gusta un centro del campo con dos tíos fuertes y uno que la toque bien y haga circular», completa su análisis Tomás Alonso. Desde luego que se abre todo un abanico en esa titularidad en la medular y donde se antoja importante Dani García o quién será quien maneje la pelota. Como será interesante ver la disposición arriba sin un media punta.

El argentino pide compromiso, dar el cien por cien y ahí los jugadores que se lo den, ganarán peso. «Fontás con él era fundamental y este año ha jugado dos partidos. El Tucu Hernández lo trajo él, le costó meses adaptarse y a partir de ahí fue la caña durante dos años, él era ese cerebro en la medular, pero este año con Unzue no ha jugado nada. Quiero decir que a lo mejor o Muniain es el puto amo o lo manda al banquillo». Por cierto, este periodista de la TVG revela que cuando el Villarreal mandó ‘ojeadores’ a seguir a Berizzo antes de que fichara por el Sevilla, «una de las cosas que más les gustó fue el respeto que le tenían los suplentes, cómo le trataban, el caso que le hacían...».

Venerado en Vigo por el legado que dejó, con carácter y sin miedo a tomar decisiones, «en lo personal es un tío cojonudo, culto, educado, un tío interesante, con criterio y discurso de la vida más alllá del fútbol, que no se esconde en sala de prensa y le gusta hablar de fútbol», le define. «En Vigo la directiva creó un mártir al no renovarle y la gente le adora». Es él, díganle Eduardo.

La pretemporada arranca el 9 de julio

El 9 de julio arranca la era Eduardo Berizzo, según anunció ayer el club rojiblanco, fecha en la que los rojiblancos están llamados a presentarse en Lezama para las pertinentes pruebas médicas y a partir de ahí iniciar sus primeros entrenamientos. Anuncio con el que coincide cuál será el primer rival del Athletic en su calendario de amistosos de pretemporada, el 28 de julio. Se trata del MSV Duisburgo, que finalizó en séptima posición en la Segunda División alemana. El encuentro se jugará en la misma ciudad germana, en el marco de un torneo local en el que los otros competidores aun no se han desvelado; Hertha Berlín, Aston Villa y Málaga fueron los invitados en 2017. Así pues, ya hay cita para ese 9 julio antes de la cual habrá que ver si hay algún descarte, toda vez que a la plantilla actual, sin Sola ni Saborit, se han unido tres fichajes, más los anunciados cachorros del filial y la presencia confirmada del cedido Asier Villalibre. J.V.