Estadísticas del partido

Con suspense, pero misión cumplida. El Eibar se ha reencontrado con la victoria, que se le había resistido en los dos últimos partidos, gracias a un gol de Sergi Enrich en el minuto 88. El tanto se ha hecho esperar pero reconoce los méritos de los azulgranas, superiores al Celta a lo largo de todo el encuentro.

El primer tiempo sólo ha tenido un color. Escarmentado por lo sucedido una semana antes en San Mamés, el Eibar ha saltado al campo con el cuchillo entre los dientes. Y el Celta ha sido incapaz de arrebatárselo. El equipo gallego ha renunciado al balón, limitándose a sufrir. Con un centro del campo inexistente y una defensa incapaz de tapar huecos, Rubén ha tenido que salvar a su equipo con dos grandes intervenciones. Media docena de córners, un gol anulado por un fuera de juego milimétrico..., parecía difícil que el partido acabara con otro resultado que no fuera la victoria local.

Pero hasta el más tímido de los rivales es capaz de hacer daño y poco ha faltado para que lo consiguiera también el Celta. Nada más empezar, con una recuperación que ha permitido a Brais plantarse solo en el área para que Dmitrovic, que regresaba a la titularidad, se luciese; y a cinco minutos del descanso, con la primera jugada elaborada de los gallegos, que Maxi ha estrellado en la madera.

El encuentro ha cambiado en la segunda parte. Con una versión mejorada del Celta, el juego se ha equilibrado, aunque los locales se seguían viendo más cerca del gol. Y vaya si han tenido una buena ocasión. Recién superada la hora de partido, el árbitro, VAR mediante, ha señalado penalti por obstrucción de Juncà a Orellana. Pero Charles, que había marcado los seis anteriores, ha enviado el balón por encima del larguero.

Jarro de agua fría al que los azulgranas han tratado de sobreponerse. Los dos entrenadores han movido banquillo sin que se notara en exceso. Aún con más oposición que en el primer tiempo, el Eibar seguía marcando el ritmo. Y llegando al área, aunque fuera con menos claridad y pólvora de lo habitual. La tenía Marc Cardona. El catalán ha saltado al campo en el minuto 81 y siete después fabricaba una magnífica jugada para que su remate, tras tocar en un rival, acabara empujándolo a gol Sergi Enrich.

Ipurua volvía a ejercer de fortín para un Eibar que deja hundido a otro rival y se coloca con un colchón de once puntos sobre el descenso.