Respira el Eibar tras sumar un punto en el Ciutat de Valencia. Los armeros ven reducida su ventaja respecto al descenso –ocho puntos ahora sobre el Celta tras la victoria de los gallegos– pero viendo lo mal que lo han pasado por momentos y después de que el Levante se haya adelantado en dos ocasiones, pocas pegas se le pueden poner a un empate que permite al equipo seguir en la zona templada de la clasificación y mantiene su renta, cuatro puntos, respecto a la propia escuadra granota.

«Buena salida gente, eh?», decía Asier Riesgo en su arenga en el vestuario instantes antes de que arrancara el partido. Y parecía que sus compañeros le hacían caso porque el primer disparo a puerta del encuentro ha sido para el Eibar, apenas cumplido el minuto, y ha acarreado también el primer córner. El problema es que el Levante ha empezado aún mejor. Morales, del que los eibarreses disfrutaron durante una temporada y al que han sufrido a partir de entonces, ha arrancado la moto a los cuatro minutos para culminar un contragolpe y colocar el 1-0 en el marcador.

Mazazo para un Eibar que había saltado al césped con novedades. Forzosas dos –Paulo y Escalante han ocupado las vacantes de los lesionados Arbilla y Diop–, habitual otra –Kike por Charles– e inesperadas las dos restantes: Cucurella se ha ido al lateral para suplir a Cote, el integrante de la plantilla con más minutos en sus piernas; y aprovechando que Orellana se colocaba a la izquierda en lugar del catalán, Pedro León ha formado parte del once titular por primera vez en toda la temporada.

El partido se le ha hecho largo al murciano, lógicamente falto de minutos, pero le ha permitido dejar su impronta: a los 18 minutos enviaba una falta al área que Escalante ha convertido en el empate a uno. Volvía a empezar el partido. Pero, lamentablemente, volvía a hacerlo de la misma forma. Porque sólo ocho minutos después, en un rápido contragolpe, Morales servía desde la izquierda para que Rochina firmara el 2-1 con una bonita volea.

El equipo guipuzcoano ha tirado adelante. Con todo el riesgo que ello supone ante un equipo como el Levante que, sin embargo, se ha visto tan atrapado por momentos que apenas ha propiciado más sustos en el área de Dmitrovic hasta el descanso. Sí lo ha hecho el Eibar, que incluso ha enviado un balón a la madera en una gran jugada personal de Orellana.

La segunda parte ha comenzado de forma similar por parte de un Eibar que apretaba; mucho por momentos. El problema es que, aunque fuera de forma intermitente, su anfitrión también ha encontrado la manera ahora de volver a salir a la contra en busca de la sentencia. Como es habitual en los enfrentamientos entre estos dos equipos, daba la impresión de que aquello podía acabar de cualquier manera.

Por suerte, el fútbol ha hecho justicia al que, aunque no por demasiado, ha sido mejor en esa segunda parte. Un Eibar que, además, ha vuelto a agradecer la entrada de Marc Cardona en la recta final. Con el catalán sobre el campo han llegado las mejores ocasiones para su equipo. También el gol del empate definitivo. Lo anotaba Enrich a un cuarto de hora del final, aprovechando un balón robado por Peña y asistido por Orellana.

A la conclusión del partido, Enrich se reconocía satisfecho por haber salvado «un punto muy importante sobre un rival directo» pero también lamentaba la «sensación de que tenemos que hacer mucho para marcar y puntuar y los rivales nos hacen daño con poco».

El Eibar, ahora con 36 puntos, recibirá el miércoles al Rayo Vallecano en Ipurua (20.30), en un partido que puede resultar decisivo para confirmar la permanencia.

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