«Andoni es pescatero en el mercado de Barakaldo. Se levanta a las 4.30, atiende el puesto y por la tarde trabaja en otra tienda. Cierra la persiana a las diez de la noche. No se queja, no pide ayudas; solo pide ideas. Esta gente merece intentarlo», rezaba el tuit del lunes que revolucionó las redes sociales y marcó la jornada de ayer la campaña electoral. Su autor, Unai Rementeria, que atendía justo ayer a GARA para una entrevista electoral que se publicará próximamente, decía a mediodía sentirse sorprendido por el eco, aunque hacía hincapié en que su madre y su tía, que regentaron un bar en su Mundaka natal, «estaban desde la mañana a la noche».
Poco después de publicarse el tuit, su rival de EH Bildu en Bizkaia, Bea Ilardia, ya salía a la palestra para reclamar a todas las personas «una vida digna que les permita trabajar y disfrutar del tiempo de ocio». Y ayer añadió en un mitin en Ezkerraldea que «en la Bizkaia que nosotras queremos y trabajamos por construir la gente trabajadora tiene derechos, no son ni esclavos ni trabajadoras y trabajadores precarios».
A la cascada de críticas se sumó el candidato del PSE a la Alcaldía de Barakaldo, Alfredo Retortillo, quien replicó que lo que necesitan los comerciantes son «condiciones de trabajo y negocio dignas». «Levantarse a las 4.30 horas para cerrar la persiana a las 22.00 horas está muy lejos de un modelo sostenible».
En un acto electoral del PSE en Sestao, la todavía diputada foral de Empleo, Teresa Laespada, manifestó ayer que ese tuit «aplaudía descaradamente el precariado y que avalaba las dobles jornadas». «Los nacionalistas no quieren empleos dignos y con derechos, quieren que nos callemos, que no protestemos, quieren que volvamos al siglo XIX», enfatizó la aspirante a diputada general por el PSE.
Desde Elkarrekin Podemos, Eneritz de Madariaga agradeció a Rementeria que «sea claro con el modelo de empleo precario que quiere, que deja morir nuestro comercio, mientras satura Bizkaia de centros comerciales». «Está muy preocupado, por eso invertirá 22.000€ en el comercio y 45 millones en la Supersur», añadió con ironía.
Lo cierto es que el famoso pescatero existe, tal y como informó Radio Bilbao. Andoni Astiz explicó en la emisora de la Ser que se levanta a las 4.00, va al mercado a comprar el género y sobre las 7.00 llega a la pescadería. Por la tarde trabaja en una tienda de ventanas. «No es para disfrutar, sino para vivir», apuntó. Se queja, eso sí; reclamó al diputado general que «no abran más grandes superficies porque perjudican al pequeño comercio» y censuró «la falta de ayudas de las diputaciones y ayuntamientos para los mercados locales, como el de Barakaldo, donde sus negocios poco a poco están cerrando».