Tras cuatro años como alcalde, Aburto repite como candidato del PNV y confía en volver a poder formar gobierno. Evita decir que va a pactar con el PSE, aunque defiende que el acuerdo ha funcionado bien y que le gustaría formar un Ejecutivo municipal estable. Destaca que han cumplido la palabra y lo reivindica como «hoja de servicios».

¿Existen dudas sobre el plan en Zorrotzaurre?

No puedo hacer que los medios digan una cosa u otra, yo jamás he dicho que se está repensando. Zorrotzaurre tiene recorrido. Se ha hecho ya la reparcelación y se ha aprobado el proyecto de reurbanización. Cambiar eso requeriría unos equilibrios que en estos momentos no serían posibles, y por eso continúa para adelante. Planteamos un uso residencial y otro de naturaleza económica con un parque tecnológico y proyectos universitarios para atraer a talento joven.

¿Por qué ha costado tantos años alcanzar acuerdos sobre el soterramiento en Zorrotza?

Por un lado está la voluntad política del Estado, que es el que tiene la competencia y era un debe en su haber. Y sobre todo, se ha avanzado porque desde el Ayuntamiento hemos optado por poner el 50% del dinero de la obra. Si no hubiéramos dado ese paso, seguramente nunca se hubiera hecho el soterramiento. La reivindicación vecinal ha sido muy importante, pero lo relevante ha sido comprometernos en una partida de 35 millones de euros.

¿Y en caso de que Madrid incumpla su parte, contemplan abonar toda la obra?

Somos de Bilbao, pero no tanto [bromea]. Quiero confiar en que, mientras no se demuestre lo contrario, los acuerdos están para cumplirlos. Siempre podemos pensar también que se tiene que producir la transferencia de esa lÍnea ferroviaria y así se abrirían nuevas expectativas.

2018 ha estado marcado por los grandes eventos. Ha asegurado que el «impacto económico» fue de 100 millones de euros. ¿Cómo se calcula esa cifra?

Es el impacto en la ciudad en impuestos locales y forales, en términos de empleo e inducidos también por las personas que vienen y gastan. Que venga MTV, por ejemplo, quiere decir que vienen un montón de personas a Bilbao a desarrollar la gala, que se hace con mucha participación local y que eso repercute en medios audiovisuales entrando en millones de hogares en el mundo. Pagar una campaña de marketing de esa naturaleza no tendría precio y gracias a ello hay personas que van a venir a Bilbao en un futuro. Hay una fórmula, que ahora no puedo trasladar, que hace que en materia impositiva y actividad económica se mida ese impacto como se hace en todos los lugares de la misma manera. Por eso decimos que hay que traer eventos que generen impacto positivo en la ciudad, para que siga ganando ese peso internacional y también en lo local a través de generación de recursos para el Ayuntamiento, que luego repercuten en la ciudad.

¿El gasto del Ayuntamiento ha sido cinco millones de euros?

Sí, esa es la inversión que se realiza para la MTV, los 50 Best, las finales de rugby, el congreso de aerolíneas europeas y otros congresos. Cuando hablamos de eventos, el principal que tenemos en Bilbao es Aste Nagusia, que mueve a más de un millón y medio de personas en una semana de nueve días que tiene un impacto económico de 80 millones de euros. Me gustaría decir, dentro de ese debate que algunos quieren hacer aludiendo de la defensa de la propia identidad, que no creo que son cosas contrapuestas. No sé porque trasladamos esa confrontación a la gente. En primer lugar apostamos por defender los intereses de los bilbainos, el equilibrio entre barrios y que las necesidades de las personas queden cubiertas. Eso es lo que da sentido a nuestra actuación. Dicho eso, hoy en día podemos hacer algo más cuando eso redunda en nuestro beneficio. Hay que tener en cuenta que el turismo supone unos 70.000 empleos en Bizkaia y esta mirada internacional que tiene Bilbao a través del Guggenheim y la transformación urbana ha hecho que se coloque en el mapa y que el rugby o MTV vengan a Bilbao. El Tour también nos dice que queremos ir a Bilbao y creo que eso tiene mucho valor y debería ser mérito de todos. No tenemos que enfrentar a MTV con Aste Nagusia ni al Tour con Itzulia, hay que trabajar por todos y cada uno de estos eventos.

La próxima legislatura San Mamés va a acoger la Eurocopa. Como alcalde de una formación abertzale, ¿cómo lo afrontaría si España se clasifica y juega como «local»?

Como alcalde abertzale acudo cada quince días a un partido de la liga española. Las chicas de la Real han sido campeonas de la Copa de la Reina y se les ve encantadas. Hay muchos jugadores de Athletic y Real que forman parte o han formado de la selección española. A mí me gustaría que hubiera una tricolor jugando la Eurocopa o Mundial, creo que es algo que se está trabajando en Euskadi. A partir de ahí, Bilbao va a ser sede de un campeonato europeo y veremos quiénes se clasifican. Apelo a que, sea quien sea el equipo que participe en esa Eurocopa, tanto los que estemos aquí como los vengan de fuera tengamos un comportamiento exquisito y no se repitan situaciones como las vividas en competiciones europeas.

Si se produjeran incidentes, ¿sentiría algún tipo de responsabilidad?

Claro que me preocupa lo que vaya a ocurrir y se está trabajando en diferentes ámbitos con la seguridad y capacidad hotelera. Recuerdo que en el Mundial del 82 jugaron Francia e Inglaterra. Francia, una selección que considero que hay territorios de mi país que están en ese Estado. Y jugó Inglaterra, que generó su conflicto. Vamos a trabajar para que todo salga de la mejor manera posible. En 2018, los datos que tenemos nos hablan de que hemos tenido unas tres millones de personas por los diversos eventos y no ha habido ningún incidente relevante. Si hay aglomeraciones pasan cosas, los hurtos suben, pero no podemos hablar de incidentes graves. En ese sentido, tenemos una experiencia como ciudad y un saber hacer en el que confío.

En el tema de seguridad reclama consensos a todos los grupos, pero desde el PP se vinvula directamente con los menores extranjeros y el fraude en ayudas. Ha trabajado en asuntos sociales, ¿qué puede decir al respecto?

Tenemos que entender que las políticas de seguridad no se pueden ejercer de manera aislada y que dependen también de las políticas sociales. No seríamos capaces de analizar cuáles serian los efectos de la inexistencia de una RGI. Luego, tenemos que tener políticas preventivas de cohesión social que favorezcan una convivencia adecuada. A partir de ahí, la firmeza más absoluta contra el que delinque o solivianta la convivencia. Apelo a la responsabilidad y seriedad, es muy importante que consensos como el pacto por la seguridad no se vean resquebrajados por las elecciones. Si hay que reconocer que han subido delitos, lo hacemos. Pero hay que reconocer también que la eficacia policial se ha incrementado en un 61% y que a Euskadi la OCD le da un 10 sobre 10 en seguridad.

Las movilizaciones de trabajadores servicios municipales han sido constantes. ¿Se puede hacer algo más desde el Ayuntamiento para mejorar las condiciones laborales?

Soy enormemente respetuoso con el derecho a la huelga y quien lo ejerza entiendo que ha analizado la situación y da ese paso. Seguro que todo es mejorable, pero desde el Ayuntamiento se ponen los recursos para que las condiciones laborales que surjan del dinero público sean las adecuadas y dignas.