Así lo ha expresado el secretario de Organización del partido, José Luis Abalos, quien ha afirmado que la gobernabilidad en el Estado y la investidura de Pedro Sánchez no depende de la formación de gobierno en Nafarroa, justo lo contrario del mensaje que emitió la vicepresidenta del Ejecutivo en funciones, Carmen Calvo, hace escasos días.
Si Calvo vinculó los pactos en Nafarroa con la prioritaria formación de gobierno en el Estado, Abalos ha llegado a decir que la operación de permitir a la coalición de Navarra Suma gobernar el herrialde a cambio de que los dos diputados de UPN favorezcan la investidura de Sánchez en una segunda vuelta con su abstención tendría un efecto colateral indeseado: la pérdida de los apoyos de los seis diputados de PNV.
«La gobernabilidad pasa por los principales partidos», ha sostenido Abalos refiriéndose a PSOE, PP, Ciudadanos y Podemos. «No pasa por lo que ocurra en Navarra. La gobernabilidad no depende de Navarra. La investidura ahora tampoco está en función de dos votos», ha indicado en alusión a los dos diputados de UPN.
«No es trascendente esta situación. Lo que hemos dicho es que no nos vamos a apoyar en Bildu. A partir de ahí cada uno hace lo que quiere. No vamos a mantener ninguna negociación», ha dicho Abalos, que no ha cerrado de este modo la puerta a que Chivite pueda sacar adelante su investidura con la abstención de EH Bildu.
Y la prueba de que los socialistas no van a negociar nada con EH Bildu estará el día 15 con la constitución de los ayuntamientos, ha avanzado Abalos. El alcalde en funciones de Iruñea, Joseba Asiron, necesita del PSN para formar una mayoría alternativa a la derecha, pero los socialistas navarros se niegan a entrar en negociaciones con EH Bildu.