Ibai AZPARREN
IRUÑEA
Interview
STAFFAN SäFWENBERG
ABOGADO Y PINTOR

«Intenté realizar un encierro en la parte vieja de Estocolmo»

Nacido en Estocolmo, lleva disfrutando de los sanfermines desde el año 1967. En 1991, planteó administrativamente un encierro, una corrida de toros e incluso la construcción de una plaza en su ciudad natal. Es miembro de la peña sueca ‘La peña más alegría’.

Staffan Säfwenberg (1941) recibe a GARA en un piso alquilado para sanfermines, ubicado en la calle Estafeta. A su lado, más de veinte suecos disfrutan sus copas mientras observan, desde el balcón, el paso de las txarangas. Su única condición para la realización de la entrevista es que el entrevistador se sirva una copa de pacharán. Llegados hasta aquí...

¿Qué es lo que le gusta de los sanfermines?

Me gusta todo, estamos un grupo de amigos suecos disfrutando de las fiestas. Lo hacemos siempre. Todo.

Pensaba que me diría el encierro sin dudarlo...

Por supuesto, pero nunca fuí un buen corredor. Llegué por primera vez en el año 1967 y corrí seis años seguidos. Es cierto que siempre no lo he hecho adecuadamente.

¿A qué se refiere?

Se va a reir. En el año 1972 corrí el encierro con unos zuecos de madera. Fue la única vez. ¡Brindemos!

Ahora entiendo la ocurrencia de organizar un encierro en Estocolmo.

Quería seguir el ejemplo de Christo Vladimirov, un artista búlgaro que enlaza el paisaje y la obra de arte. Era mi proyecto; intentar administrativamente realizar un encierro en la parte vieja de la ciudad de Estocolmo. Sabía que no iba a funcionar.

¿Cuál fue el primer paso?

Hablé con Eduardo Miura, en el año 91. Les dije que tenía ese proyecto y les pregunté a ver si me vendían toros. Me dijeron que sí, pero el problema era transportarlos. Así que envié una carta a Iberia, diciéndoles que quería llevar seis toros desde Sevilla a Estocolmo. Me dijeron que contratase a un camionero.

Se encontró con problemas antes de llegar a Suecia.

Fue un proceso en el que yo iba haciendo peticiones por carta a las autoridades y ellos me iban diciendo las razones por las que no podía hacerlo. Hablé con veterinarios, con la Policía Local e incluso con un ministro que me dijo que no. Intenté, además, conseguir el permiso para construir una plaza.

¿Y cuál fue la respuesta?

Que la zona que elegí estaba muy cerca del mar (ríe).

¿Veremos un encierro en Estocolmo?

Creo que no pero podría ser. Técnicamente es posible.