A un año del Gobierno de Iván Duque, el Consejo Político de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) ha manifestado una vez más su «honda preocupación» por el estado de la implementación de los acuerdos de La Habana y «la enorme distancia entre el discurso presidencial sobre su compromiso de cumplir lo convenido y las prácticas» del Gobierno.

Constata «el evidente propósito» del Ejecutivo de «romper su integralidad para despojarlo de su potencial transformador», sobre todo, en los puntos modales de la reforma rural integral, la participación política, la apertura democrática y la solución al problema de las drogas.

«Se equivoca el Gobierno de Duque cuando considera que el acuerdo de paz puede ser simplificado a la comparecencia de los exintegrantes de las FARC a la JEP, a la reincorporación socioeconómica a través de proyectos productivos de menor alcance».

Denuncia la muerte desde la firma de los acuerdos en noviembre de 2016 de 143 exguerrilleros y que cerca de 400 aún siguen en prisión pese a la ley de amnistía aprobada.

Al tiempo que exhorta a Duque a «cesar el desgaste inútil en sus propósitos de revisar y limitar el acuerdo de paz» y a «encauzarse a cerrar la brecha entre el discurso de compromiso con la paz», le insta a reanudar las conversaciones con el ELN.

Duque: «Pensar en el tricolor nacional»

Con motivo de las celebraciones del bicentenario de la independencia de Colombia, Duque pidió «dejar a un lado los mismos» y pensar «en el tricolor nacional». «Esta Colombia del bicentenario es y debe ser la gran oportunidad para la unión del país pensando en la edificación de un mejor futuro».

En su discurso, no hizo alusión alguna a la implementación de los acuerdos de La Habana ni a los sistemáticos ataques contra exguerrilleros, líderes sociales, activistas y defensores de derechos humanos.

Se limitó a pedir para el futuro de Colombia la construcción de «una segunda oportunidad sobre la tierra», la que «no tuvo la estirpe del coronel Aureliano Buendía» en “Cien años de soledad”.