Joseba ITURRIA

Real: el mercado con más gasto y más incorporaciones al primer equipo

La Real cerró el lunes con la presentación de Nacho Monreal y la confirmación del fichaje de Robert Navarro el mercado de verano en el que más dinero ha gastado en siete fichajes al superar el de 2015, en el que pagaron 24 millones por la vuelta de Illarramendi y Jonathas, y el que más jugadores ha incorporado al primer equipo al sumarse cuatro del filial.

Las diez incorporaciones registradas en la primera plantilla de la Real igualan un récord triste en la historia del club, el del verano de 2006, en el que llegaron Bravo, Gerardo, Juanito, Diego Rivas, Savio, Víctor López y Fabio Felicio y subieron al primer equipo Mikel González, Ion Ansotegi e Iñigo Díaz de Zerio. Luego en el mercado de invierno ficharon a Germán Herrera y Jesuli para bajar a Segunda con una plantilla en la que estuvieron durante la temporada diecisiete fichajes.

También es el mercado de verano en el que la Real ha gastado más porque, aunque en 2015 pagó 24 millones de euros en los traspasos de Illarramendi y Jonathas, esa cifra sí se superaría en función de que se cumplan algunas variables y las fichas de todos los que han llegado son altas. Para hacer hueco a esos diez jugadores han salido Rulli, Kevin Rodrigues, Theo, Raúl Navas, Héctor Moreno, Bautista, Merquelanz, Juanmi y Sandro, con lo que queda una primera plantilla de 24 jugadores, a los que hay que sumar a Andoni Zubiaurre como tercer portero.

Llegan diez jugadores pese a pelear por Europa hasta la última jornada a pesar de fracasar la apuesta por Asier Garitano como entrenador y con Theo para el lateral izquierdo y Sandro como jugador de banda y de no fichar al media punta que se necesitaba para cubrir la baja de Xabi Prieto. A pesar de ello y de la cantidad de lesiones de jugadores importantes, la Real jugaría la Europa League esta temporada solo con haber ganado el último partido de Liga en el campo del Espanyol y haber superado las previas fáciles como el equipo catalán. Solo con la llegada desde el filial de Imanol, Aihen y Barrenetxea bastó para pelear por Europa hasta el final a pesar de todos los problemas.

El único fichaje que necesitaba la Real era el de Odegaard, un acierto porque llega cedido para dos temporadas, sin riesgo económico y da margen para el crecimiento del Roberto López. Ha dado la única victoria con un gol en el que demostró su calidad y va a ayudar por sus cualidades y su buena adaptación al estilo de juego de la Real. También es comprensible el fichaje de Monreal a pesar de que frena la progresión de Aihen. Es difícil rechazar a un jugador que prefiere jugar en la Real antes que en el Arsenal, a pesar de que Unai Emery lo quería y por eso lo alineó en los tres primeros partidos y lo iba a utilizar en el cuarto. Además su fichaje se empieza a fraguar el verano anterior antes de que la Real buscara la cesión de Theo. Entonces Aihen no había demostrado su nivel, pero hasta este gran fichaje tiene una gran parte negativa porque no se puede competir con un jugador de su calidad y experiencia. Bastó el entrenamiento del lunes para ver su calidad y capacidad de mando en una zaga con poca experiencia.

El fichaje más caro ha sido el de Portu, diez millones de euros, y uno de los más innecesarios porque para las dos posiciones de banda en las que puede jugar están Oyarzabal, Barrenetxea y Januzaj, el jugador más influyente en la temporada anterior. El juvenil solo ha jugado ocho minutos en las tres primeras jornadas y es otro de los perjudicados por la cantidad de fichajes de este verano. Se busca con Portu un jugador diferente, pero su forma de jugar tampoco encaja en la de la Real. Es diferente a Januzaj, que ha sido el que mejor ha cubierto cuando ha jugado la marcha de Vela. Y lo mismo pasa con Isak, por el que se han pagado 6.5 millones más variables, que nada tiene que ver con Willian José. Y lo peor es que el brasileño ha sido cambiado en los tres primeros partidos para darle entrada y eso es preocupante porque es el mejor rematador, el que ofrece una salida al juego ofensivo y clave en la defensa del balón parado. Además eso ha supuesto mandar a Bautista a un pésimo equipo como el Eupen, penúltimo de la Liga belga con dos puntos en seis jornadas, y solo tres goles a favor, uno del realista.

Tampoco Remiro y Sagnan mejoran a los que se han ido y Moyá ha empezado como titular cuando era suplente de Rulli y el francés ha sido suplente en un equipo de la Segunda francesa y juega en la posición de Jon Pacheco. El caso de Robert Navarro tampoco encaja en una Real que difícilmente puede sostener que es un club de cantera con tantos fichajes. El catalán juega en la posición de Roberto López y Sangalli. Tampoco es un ejemplo fichar para la posición de un icono como Xabi Prieto a un chaval que con 17 años recién cumplidos llega a su cuarto club profesional. Al final, como con Merino, Remiro y Monreal, se ficha a jugadores que encajan en la filosofía del Athletic, pero lejos de perjudicarle esos fichajes a la larga le pueden beneficiar. Porque en los últimos dos años la Real ha subido cinco canteranos, Le Normand no se puede considerar como tal porque fue fichado el año que iba a cumplir 20 años tras debutar con el Brest. Pero de todos ellos solo Aihen Muñoz ha jugado los tres primeros partidos y seguramente dejará de hacerlo con Monreal. De los otros cuatro, Merquelanz ya ha salido cedido y entre los otros tres suman 21 minutos en las primeras tres jornadas. Da la sensación de que se suben jugadores del filial sin tener una gran confianza en ellos y queda una plantilla de 24 jugadores que va a ser difícil de manejar para Imanol si no hay buenos resultados y va a dificultar que los jóvenes del Sanse puedan tener opciones. Al final si se quiere hacer daño al Athletic lo mejor es que los chavales tengan claro que el mejor sitio para llegar a Primera es la Real y eso es difícil de trasmitir después de lo que se ha vivido este verano.