GARA
la habana

Cuba estrena un nuevo sistema de reparto de poder y una nueva generación en el Gobierno

Cuba estrenó ayer un nuevo sistema de reparto de poder y una nueva generación en el Gobierno, que releva a la generación histórica de 1959, pero sin renunciar al socialismo. La Asamblea Nacional se preparaba para elegir ayer a Miguel Díaz-Canel como presidente de la República, un cargo que desapareció en 1976.

El socialismo y la elección indirecta permanecen, pero algunas estructuras cambian: Cuba tenía previsto estrenar ayer un nuevo sistema de poder repartido en varias manos, que releva a la generación histórica de 1959.

La Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento unicameral) inició el debate para elegir entre sus actuales 599 diputados al presidente de la República –un cargo que desapareció en 1976 y ha sido recuperado por la nueva Constitución recién aprobada–, y la nueva dirección de la Asamblea y el Consejo de Estado.

Hasta ahora, la principal figura era el presidente de los Consejos de Estado y Ministros, puesto que ocuparon Fidel (1976-2008) y Raúl Castro (2008-2018), quienes además tenían el cargo de primer secretario del gobernante Partido Comunista de Cuba. En abril de 2018, Miguel Díaz-Canel sucedió a Raúl, aunque este, su mentor político, mantendrá el liderazgo del PCC hasta 2021.

Se esperaba que Díaz-Canel fuera confirmado ayer como presidente de la República y que se rodee de sus contemporáneos, siempre bajo la atenta mirada de los líderes históricos.

Miguel Díaz-Canel, de 59 años, iniciaría así su primer mandato de cinco años como presidente, más de un año después de asumir la dirección de Cuba, y podría tomar decisiones sin depender formalmente de la apro- bación del Consejo de Estado.

Estos cambios implican también una desconcentración del poder Ejecutivo frente al modelo que rigió durante décadas en Cuba.

Díaz-Canel tiene la tarea de acelerar la lenta reforma económica de la isla, en un contexto adverso después de que Washington haya reforzado el bloqueo que impone a la Cuba desde 1962 al acusar a La Habana de apoyar militarmente al Gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela.

Ahora EEUU sanciona a los barcos que transportan petróleo desde Caracas, lo que ha ocasionado escasez de combustible y cuya fase más crítica consideró ayer mismo superada el presidente cubano, quien reveló que la isla puede cubrir en este momento el 62% de sus necesidades.