Se trata de que Iruñea siga dando pasos en pro de la seguridad y de que se corrijan conductas indebidas sancionables según esa misma normativa.

Se hará hincapié en aspectos como la circulación por aceras, la convivencia peatón – ciclista – VMP y vehículo a motor – ciclista – VMP y a aspectos de seguridad vial como el uso de luces, chalecos o cascos protectores, entre otros, ha informado el consistorio.

El objetivo de la campaña es conseguir esa convivencia en las diferentes vías de la ciudad, para que las aceras sean un espacio seguro para los peatones, para que las bicicletas y VMP ocupen los espacios destinados a su circulación y para que los vehículos a motor respeten en la calzada a las personas ciclistas y VMP.

La campaña de vigilancia se realizará durante diez días, con una especial atención a las franjas horarias más concurridas por quienes circulan en bici y VMP en los desplazamientos de entrada y salida del trabajo, colegio o universidades, así como el control de zonas de esparcimiento por la tarde (Vuelta del Castillo o paseo del Arga).

En Iruñea, como en otras ciudades, se dan conflictos en los desplazamientos entre peatones y ciclistas, en aceras, en zonas peatonales y en pasos de cebra, principalmente, a los que se une la irrupción de los vehículos de movilidad personal, (VMP), que también hacen uso indebido de estos mismos espacios.

En ocasiones el peor parado es el peatón, con accidentes, golpes o atropellos por la incorrecta circulación de estos vehículos, sintiéndose en ocasiones inseguros al transitar por la acera.

Esa misma inseguridad la padecen personas usuarias de bicicletas o VMP cuando deben circular por la calzada junto a los vehículos motorizados. Se trata con esta campaña de corregir las conductas indebidas utilizando como herramienta la nueva Ordenanza de Movilidad.