La sala de instrucción del Tribunal de Apelación de París ha dado a conocer esta tarde su opinión favorable a aceptar la demanda de extradición cursada por la Audiencia Nacional española contra Josu Urrutikoetxea en relación al atentado de ETA contra el Cuartel de la Guardia Civil en Zaragoza (1987).

El pronunciamiento no es firme ya que cabe recurso. La defensa ha confirmado que recurrirá la decisión, para lo que tiene un plazo máximo de cinco días.

Casa que el recurso en casación fuera rechazado, correspondería al Gobierno francés adoptar la última decisión, ya que en procesos de extradición es preceptiva la firma del correspondiente decreto por el ejecutivo.

El Gobierno galo no tiene ni la obligación ni plazos concretos para adoptar esa decisión, ha recordado en declaraciones a NAIZ Egoitz Urrutikoetxea, hijo del preso vizcaino, recluido desde su detención en la cárcel parisina de La Santé.

Complemento de información

En el caso de las otras tres demandas de entrega que pesan sobre Urrutikoetxea –dos euroórdenes y una segunda petición de extradición– la Audiencia Nacional española deberá remitir en el plazo de diez días la información complementaria solicitada también hoy por el Tribunal de Apelación de París.

Concretamente, asumiendo la petición de la defensa, el tribunal pide a la Audiendia Nacional que clarifique la calificación, en el caso de la demanda por «crímenes contra la humanidad» y en otro de los sumarios -el relativo al atentado cometido en 1980 por ETA-pm, organización en que no militó Urrutikoetxea, y que costó la vida a Luis Hergueta, directivo de la empresa Michelin, en Vitoria- solicita que remita documentación relativa al plazo de prescripción.

El tribunal parisino ha fijado la fecha del 4 de marzo para pronunciarse sobre esas tres demandas. También cabe presentar recurso contra esas decisiones.

Proceso largo

La sala de instrucción del Tribunal de Apelación de París analizó el pasado 13 de noviembre las cuatro demandas de entrega cursadas por la Audiencia Nacional española contra Josu Urrutikoetxea, detenido el 16 de mayo de 2019 en la localidad de Sallanches (Alpes franceses).

El fallo sobre las dos euroórdenes debía conocerse el 18 de diciembre, pero finalmente el pronunciamiento se retrasó a hoy, 8 de enero, fecha señalada también de antemano para el pronunciamiento sobre las dos demandas de extradición.

Dada la significación que las autoridades españolas otorgan a su figura, y las presiones de todo tipo consiguientes, Urrutikoetxea se enfrenta a un proceso judicial complejo.

Globalmente ese procedimiento tiene como base por una parte las dos condenas por rebeldía que le fueran impuestas en el Estado francés, y que la defensa de Urrutikoetxea ha recurrido –lo que obliga a la repetición del juicio desde el principio–, y por otra esas cuatro demandas de entrega –dos por el mecanismo de euroorden y dos por extradición– presentadas por la Audiencia Nacional española.

Recientemente, una de las «causas francesas» ha vuelto a la instancia de instrucción, en el Tribunal Correcional. La otra será juzgada por el Tribunal de Apelación, que todavía no ha fijado fecha de audiencia.

En lo que se refiere a las «causas españolas«, las dos euroórdenes, cuyo análisis ha priorizado la Justicia gala por ser más más recientes, son una por «crímenes de lesa humanidad» y otra relativa al caso de las «herriko tabernak».

Cabe recordar que tras el fallo del Tribunal Supremo español, que rebajó las condenas, no hay nadie en prisión por el caso de las «herriko tabernak».

Por lo que respecta a la acusación de «crimen de lesa humanidad», los tribunales españoles tratan de sostener la demanda de entrega basada en esa excepcional acusación –sobre la que el tribunal parisino ha pedido hoy aclaraciones– en el atentado en el aeropuerto de Barajas, llevado a cabo por ETA en 2006, y en el que perdieron la vida dos ciudadanos latinoamericanos.