Hora y media ha durado la reunión en el Palau de la Generalitat entre los presidentes catalán y español, Quim Torra y Pedro Sánchez, primera que mantenían desde la cita de Pedralbes de diciembre de 2018.

En plena entrevista, Sánchez ha intentado sacar ventaja mediática filtrando a los medios el documento de cuatro páginas que ha esgrimido ante Torra. En él se comprometía a poner en marcha la mesa Gobierno-Govern en febrero (después de que amagara con aplazarlas hasta después de las elecciones catalanas y se retractara a demanda de ERC). Pero por lo que respecta la desjudicialización de la cuestión, pactada también con ERC, es extremadamente ambiguo al anunciar solo «búsqueda de soluciones en el marco de la Constitución».

‘Agenda para el reencuentro’ es el pomposo nombre dado por Sánchez a su documento. «A juicio del Gobierno de España, hoy es el día en que tiene que comenzar ese diálogo», ha dicho en rueda de prensa posterior. Ha abogado por superar la fase del «empate perpetuo» y pensar en otro futuro, tras calificar de «gran honor» haber sido recibido por Torra.

El mandatario catalán, Quim Torra, ha hablado también de cita «importante» y «cordial», en un tono similar en lo amistoso. Y sobre todo ha confirmado la participación en la mesa indicando que «si hay voluntad de resolver el conflicto, hemos estado y estaremos siempre». «Pero no sabemos cuál es la propuesta del Gobierno español –ha matizado acto seguido el president–. Nosotros sí tenemos un consenso en la mayoría independentista para abordar el ejercicio del derecho de autodeterminación, con un referéndum, y el fin de represión, con amnistía y revisión de la judicialización».

«Sobre lo primero, el presidente Sánchez no se ha movido: autogobierno dentro de la Constitución. Y no hay respuesta sobre la segunda», ha aclarado el president, que en diferentes momentos de su intervención ha hecho hincapié en que él no se sentará en representación de la Generalitat sino de algo más amplio: el conjunto del independentismo, en el que ha incluido a las tres principales fuerzas (JxCat, ERC y CUP) y a otras entidades civiles y políticas.

Falsas expectativas o soluciones

«He intentado ser muy claro con el presidente Sánchez. Si hay una negociación, será para abordar los problemas de fondo», ha dicho Torra.

La propuesta del presidente español añadía en su propuesta diversas cuestiones de autogobierno, económicas o de infraestructuras, en su objetivo de restringir la mesa de diálogo a este ámbito. Torra ha dicho que no se han abordado hoy y que tampoco deben tener sitio en esa mesa sino en otros foros.

«No estamos aquí para generar falsas expectativas, sino para encontrar soluciones», ha concluido Quim Torra.