Soledad GALIANA
DUBLÍN

Sinn Féin abre vías para formar el primer Gobierno de izquierdas

La presidenta de Sinn Féin, Mary Lou McDonald, ha expresado su voluntad de convertirse la primera ministra de Irlanda después de ganar el voto popular en las elecciones generales

Sigue el recuento en Irlanda, y aunque cambiará el número de diputados, algo que no cambiará será el hecho de que Sinn Féin ha sido el partido más votado en estas elecciones generales, consiguiendo por encima del 24 % de las primeras preferencias y con ello 37 diputados, que podrían haber sido más si el partido republicano hubiera presentado un mayor número de candidatos a estas elecciones.

A la espera de los resultados de 17 escaños, Fine Gael contaba con 32 y Fianna Fáil con 31. Los Verdes han conseguido por ahora 10 diputados, los laboristas tenían seis candidatos elegidos. El partido de izquierdas Solidarity-PBP contaba con cinco escaños, y los Social Demócratas con cuatro. A ellos se unen 20 diputados independientes. 

Sinn Féin fue cauto después de los malos resultados de las elecciones locales y europeas del pasado año, en las que perdió a dos de sus tres eurodiputados en la República irlandesa y casi un tercio de sus concejales.

En el día de ayer, muchos de esos concejales que perdieron las elecciones no solo son diputados, sino que han sido los candidatos más votados en sus distritos electorales –nueve de los diez candidatos más votados son de Sinn Féin, y el mayor porcentaje de voto para un candidato lo obtuvo Dessie Ellis, de esta formación, con más de un 44 %.

En aquellos distritos electorales en los que Sinn Féin presentaba dos diputados, ambos fueron elegidos.

Si la tormenta Ciara azotaba a Irlanda durante el sábado y el domingo, la marea de Sinn Féin arrasaba en los centros de recuento. 

En el condado de Longford-West Meath, donde no había habido un diputado de Sinn Feín desde 1923, la candidata de este partido, Sorca Clarke, que obtuvo poco más de 500 votos en las elecciones locales, fue elegida con más de 11.000.

Su compañera de partido en Roscommon-Galway, Claire Kerrane, se convertía en la primera diputada de Sinn Féin en ese distrito electoral desde la creación del Estado irlandés hace 99 años.

Y no solo han conseguido los republicanos con sus votos que 37 de sus 42 candidatos hayan resultado elegidos, ya que al permitir el sistema irlandés que los electores elijan a tantos candidatos en orden de preferencia como deseen. han elevado hasta la elección a candidatos de otros partidos de izquierdas, laboristas, socialdemócratas, verdes e independientes de izquierda. 

Ello se debe a una estrategia concertada inicialmente desde las redes sociales, donde votantes de los partidos de la izquierda irlandesa incitaban a una estrategia de voto táctico para acabar con el bipartidismo y la alternancia de poder entre los cristiano-demócratas de Fine Gael (FG), y los liberal-demócratas de Fianna Fáil (FF).

Sin embargo, esta estrategia solo ha funcionado porque Sinn Féin ha sacado a los votantes de sus casas, particularmente a aquellos que sufren con la falta de servicios públicos, particularmente la sanidad y el transporte, y la crisis de la vivienda.

Mary Lou McDonald, la líder de Sinn Féin, lo resumió a la perfección durante el segundo debate electoral entre líderes –el único en el que los medios le dejaron participar– y en el que describió a Fine Gael como el partido de los constructores y a Fianna Fáil como el partido de los especuladores de la vivienda.

Debacle conservadora

La mejor elección para Sinn Féin en la historia de la república de Irlanda, es la peor de Fine Gael desde 1945 y la peor para FF desde 2012.

Los líderes de ambos partidos, el hasta ahora primer ministro irlandés, Leo Varadkar, y Michéal Martin, tuvieron que sufrir varios recuentos para ser elegidos, mientras que Mary Lou McDonald obtuvo su escaño en el primer recuento. Ambos han sufrido pérdida de diputados, entre ellos históricos del partido y ministros en sucesivos gobiernos.

Aún en estado de shock, FG hablaba de liderar un Gobierno cuando posiblemente sea el tercer partido en número de escaños, mientras que Martin, de FF, ha cambiado su política preelectoral de no entrar en Gobierno con Sinn Féin a la posibilidad de la apertura de una negociación con el partido de izquierdas.