El presidente de la Junta Electoral del País Vasco, Juan Luis Ibarra, ha asegurado este miércoles que no corresponde a este órgano decidir sobre un eventual aplazamiento de las elecciones del 5 de abril por la epidemia de coronavirus, y ha lamentado que éste es un asunto en el que existe una «laguna de Derecho» en el Estado español.

Ibarra, en declaraciones a los medios de comunicación, ha explicado que en la reunión prevista para este miércoles de la Junta Electoral de la CAV no se va a abordar el tema de la posible modificación de la fecha de las elecciones.

De hecho, ha señalado que el encuentro de este miércoles, en la sede del Parlamento de Gasteiz, tiene el objetivo de analizar las medidas que se pueden adoptar durante la campaña electoral y el día de los comicios para evitar contagios por coronavirus.

«Se trata de disponer los medios de prevención para que la campaña, la votación y el escrutinio se puedan desarrollar con garantías para la salud», ha manifestado Ibarra, que ha precisado que las medidas que puedan fijarse ahora están abiertas a posibles modificaciones si cambia el actual escenario epidemiológico.

Respecto a la posibilidad de cambiar la fecha de los comicios por causa de la epidemia, ha asegurado que ésta es una decisión que no corresponde a la Junta Electoral del País Vasco. Ibarra no ha precisado cuál sería, a su juicio, el órgano o instancia competente para adoptar una decisión de este tipo.

«Es una pregunta estupenda para los teóricos del Derecho. No para el presidente de la Junta Electoral», ha manifestado, tras lo que ha explicado que en el Estado español existe una «laguna de Derecho» respecto a esta cuestión.

El presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco y de la Junta Electoral de la CAV ha afirmado que, debido a dicha «laguna», en el ordenamiento jurídico español no existe una respuesta «expresa» para afrontar este tipo de situaciones.

Si hubiera urnas, medidas de excepción

Así las cosas, en la reunión se ha aparcado esta posibilidad y se han preparado medidas de salud pública por si finalmente se convocara a las urnas.

Por ejemplo, se colocarían depósitos de desinfectantes y se facilitarían guantes a todos los miembros de las mesas, apoderados e interventores en los cerca de 800 colegios electorales.

Además, para evitar que se acumulara gente en las horas punta, la Ertzaintza se encargaría de gestionar las esperas en los colegios.

Ibarra ha recordado que ayer el Gobierno español acordó suspender los actos en espacios cerrados en los que se congreguen más de mil personas en las zonas más afectadas, entre ellas en Gasteiz.