El plan que baraja el Gobierno español en caso en de que la situación le obligue a endurecer el estado de alarma contempla la paralización de sectores laborales no esenciales, según ha desvelado la Cadena Ser.

Según la cadena radiofónica, la orden a la que han tenido acceso está ya redactada como borrador y, si llegara a aplicarse, supondría el cierre de actividades como la industria o la construcción, actualmente en activo.

En los ocho folios de los que consta, sólo se mantendrían tres sectores de actividad. A saber; cultivos, pesca, ganadería, agricultura y otras ramas del sector primario; textiles y ropas de trabajo –la orientada a la protección de los sanitarios–; y la fabricación de productos químicos farmacéuticos o equipos que puedan servir para el suministro médico o terapéutico.

En total, el documento contempla 51 excepciones, pero el resto debería echar el cierre para limitar aún más el contacto en los centros de trabajo. Además, el plan de contingencia con el que trabaja el Gobierno español contempla la capacidad de flexibilizar o endurecer aún más esas condiciones.

La decisión final será política y dependerá de la evolución de la curva, que de momento sigue claramente al alza pese a los mensajes oficiales contradictorios sobre la cercanía o no del pico de esta fase de la infección. Fernando Simón, coordinador de la Mesa, ha apuntado a ello este sábado, pero el ministro de Transportes, José Luis Ábales, dice en entrevista a un diario italiano que no percibe ese pico por el momento.

Medidas para los alquileres

En otro orden de cosas, la misma Cadena Ser informa de que el Gobierno español prepara una línea de ayuda para quien no puedan hacer frente al pago de sus alquileres. En total, serían 100 millones de euros en créditos a tipo cero, que sólo podrán usarse para pagar el alquiler. Tendrán periodos de devolución de hasta 6 años y si, venciendo este tiempo, las familias afectadas no pudieran devolverlas, será el Plan de Vivienda del Estado quien corra con estos gastos.