Cuando se cumplen 100 días desde que se detectaran los primeros casos de coronavirus en el mundo y se lanzara el primer Plan Estratégico de Preparación y Respuesta al virus, Tedros Adhanom Ghebreyesus, el director general de la OMS, ha alertado de que la tasa de mortalidad del nuevo coronavirus es 10 veces superior a la de la gripe.
«La propagación global del virus ha saturado a los sistemas sanitarios, ha alterado a la economía mundial y ha provocado una paralización social de forma generalizada», ha dicho el director general de la OMS.
El nuevo coronavirus ya ha infectado a más de 1,3 millones de personas en todo el mundo y provocado la muerte de casi 80.000. Una pandemia que ya es «mucho más que una crisis sanitaria» y que puede causar «mucho daño a los países más ricos», si bien Tedros ha avisado de que todavía está por ver la devastación que puede causar en las regiones más pobres y desfavorecidas.
Segunda edición del plan estratégico
Precisamente por ello, en la segunda edición del plan estratégico de la OMS para hacer frente al Covid-19, que se espera que se publique en los próximos días, se va a hacer especial énfasis en las medidas para apoyar a los países más desfavorecidos.
En concreto, el nuevo documento, según ha adelantado Tedros, se sustentará en cinco pilares básicos: movilizar a todos los sectores y comunidades; controlar casos esporádicos, grupos y prevenir la transmisión comunitaria; suprimir la transmisión donde ocurra; atender de forma adecuada a todos los casos para reducir la mortalidad; y fomentar el desarrollo de vacunas y terapias «seguras y efectivas».
«Estos objetivos estratégicos deben estar respaldados por estrategias nacionales adaptadas para encontrar, probar, aislar y atender cada caso, y rastrear cada contacto», ha dicho el director general de la OMS, para comentar que, a su vez las estrategias nacionales deben ser apoyadas a nivel internacional en cinco áreas clave.
Estas áreas se basan en el apoyo a los países para desarrollar sus capacidades de preparación y respuesta; el fomento de análisis epidemiológicos y comunicación de riesgos; la coordinación de la cadena global de suministro; la movilización de profesionales sanitarios; y el aceleramiento de la investigación, innovación e intercambio de conocimientos.
«Nuestro segundo Plan Estratégico de Preparación y Respuesta estimará los recursos necesarios para implementar estrategias nacionales e internacionales durante la próxima fase de la respuesta. Todos estamos juntos en esto, y todavía tenemos un largo camino por recorrer. Debemos poner en cuarentena la politización de este virus a nivel nacional y mundial. Tenemos que trabajar juntos y no tenemos tiempo que perder», ha zanjado Tedros.