Desde ELA han afirmado en un comunicado que ven este nuevo escenario «con preocupación» ya que consideran que es «imprescindible que la vuelta paulatina a la actividad ordinaria y, por supuesto, toda la actividad urgente e indemorable, se hagan con todas las garantías tanto para la seguridad y salud de la plantilla, como de los pacientes».
«A día de hoy no sabemos qué profesionales de Osakidetza están o han estado contagiados. Por el momento, no se han hecho los correspondientes test a todos los trabajadores de Osakidetza, lo que equivale a que puedan estar contagiando tanto a pacientes como a compañeros», ha añadido.
ELA recuerda que desconocen si los pacientes que acuden a los hospitales y centros de salud «están o no contagiados por coronavirus. Tanto en esta fase de vuelta a la normalidad, como ante un eventual repunte del coronavirus, debe realizarse una valoración de los riesgos que puedan existir en los distintos niveles asistenciales y en base a ello poner en marcha las pertinentes medidas preventivas y dotar a los profesionales de EPIs suficientes y adecuados».