Dabid Lazkanoiturburu

La Liga Árabe debate el programa anexionista israelí de Cisjordania

Los palestinos han reunido de urgencia a la Liga Árabe tras el acuerdo de gobierno israelí para la anexión del valle del Jordán y las colonias judías en Cisjordania. El plan cuenta con el impulso de la Administración Trump. Tampoco parece que su rival, el demócrata Biden, vaya a salir al paso y enmendar la plana a Israel.

Un israelí agita su bandera con la vista puesta en la colonia de Maale Adumim, en Jerusalén Oriental. (MENAHEM KAHANA  | AFP)
Un israelí agita su bandera con la vista puesta en la colonia de Maale Adumim, en Jerusalén Oriental. (MENAHEM KAHANA | AFP)

La Liga Árabe ha celebrado hoy jueves, a petición de la Autoridad Palestina (ANP), una reunión de emergencia pero solo a nivel de ministros de Exteriores ante los planes del Gobierno de Israel de anexionar partes de Cisjordania, incluido el valle del Jordán.

Estos planes, que toman como base y pretexto la iniciativa que el presidente de EEUU, Donald Trump, presentó en enero con el cínico título de ‘Acuerdo del Siglo’, recibieron hace una semana un espaldarazo cuando el primer ministro en funciones, Benjamin Netanyahu, y el líder de la oposición, Benny Gantz, cerraron un pacto de gobierno de unidad nacional que incluye la anexión de buena parte de Cisjordania, anexión que será presentada al Parlamento (Knesset) el 1 de julio.

El plan de Trump, que su arquitecto y yerno del inquilino de la Casa Blanca, Jared Kushner, acompasó hasta las elecciones israelíes del 2 de marzo y las consiguientes negociaciones, prevé hacer de Jerusalén la capital «indivisible» de Israel y la anexión por el Estado sionista del valle del Jordán y de 130 colonias judías en Cisjordania.

El 60% del territorio

Las colonias, que ocupan 450.000 judíos, y el valle del Jordán, lengua de tierras agrícolas entre el lago Tiberiades y el Mar Muerto, componen la zona C, bajo control total de Israel en virtud de los Acuerdos de Oslo, y que supone el 60% del territorio de Cisjordania.

Ese control de facto se convertiría en anexión de iure y supondría no solo la extensión de la frontera oriental de Israel hasta Jordania sino que fragmentaría totalmente Cisjordania, al punto de que ciudades como Jericó quedarían totalmente aisladas.

Biden y Jerusalén

El plan estadounidense prevé unir con un corredor lo que les quede a los palestinos de Cisjordania con Gaza y establecer la capital de Palestina en un suburbio de Jerusalén llamado Abou Dis.

El plan de EEUU, que hace saltar por los aires lo que quedaba de los acuerdos entre Palestina e Israel (Camp David, Oslo, Madrid...), lleva la firma de Trump pero no parece que vaya a ser radicalmente denunciado por la oposición demócrata.

Su candidato, Joe Biden, ha asegurado hoy en un acto de recogida de fondos que si llega a la Casa Blanca mantendrá el cambio de la embajada de EEUU en Jerusalén realizado por su rival.

Tras justificar su decisión ante un «hecho consumado». Biden se ha comprometido a reabrir el consulado de EEUU en Jerusalén Oriental «para dialogar con los palestinos en la perspectiva de una solución de dos estados, la mejor si no la única para garantizar la existencia de Israel».