En la sesión ordinaria que se ha llevado a cabo de forma telemática desde su sede de Derio, la Junta General de Accionistas de Euskaltel ha aprobado por amplia mayoría todas las propuestas presentadas por la dirección. Por tanto, ha dado luz verde a las cuentas anuales y a los informes de gestión y al estado de información no financiera correspondientes al ejericio de 2019.

En su intervención, el consejero delegado del grupo, José Miguel García, ha destacado el cumplimiento de todos los objetivos comunicados al mercado.

«Hemos completado con éxito la hoja de ruta que nos habíamos marcado, lo que ha redundado en un crecimiento en clientes y en rentabilidad de la compañía –ha subrayado–. Los hitos de nuestra hoja de ruta han sido la consecución de una estructura organizativa única, la consolidación y transformación del negocio actual y el lanzamiento a nivel nacional con la marca Virgin telco».

Incremento de rentabilidad

En cuanto a los resultados de negocio en el primer trimestre del año, según los responsables del Consejo, muestran la vuelta al crecimiento y la rentabilidad, lo que ha permitido reducir el nivel de endeudamiento de manera significativa: los ingresos han subido un 0,1% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, la rentabilidad ha crecido con un aumento del ebitda del 8,1%, al tiempo que la reducción de la deuda se ha acelerado, hasta 4,1 veces el ebitda.

La Junta también ha aprobado la propuesta de aplicación del resultado del Grupo Euskaltel y de distribución del dividendo correspondiente al ejercicio cerrado a 31 de diciembre de 2019. El dividendo final que se distribuirá a los accionistas es de 31 céntimos por acción, lo que implica la distribución de más de 55 millones de euros.

Se trata del cuarto año consecutivo de distribución de dividendo desde la salida a bolsa de la compañía en julio de 2015.

Lanzamiento de Virgin telco

Otro de los hito de la mencionada hoja de ruta ha sido el inicio del plan de expansión con el lanzamiento, el pasado 20 de mayo, de la nueva marca Virgin telco, con el objetivo de llegar al 85% del mercado del Estado español, al que la compañía no tenía acceso hasta este momento, para poder dar servicio a un total de 18,4 millones de hogares.

Para ello, el grupo parte de «la base de la fortaleza en sus mercados naturales de País Vasco, Galicia y Asturias», donde opera con sus tres marcas respectivas: Euskaltel, R y Telecable.

«España es un mercado con una de las infraestructuras de telecomunicaciones más completas tanto de Europa como del mundo, y ahora necesita a nivel nacional una oferta más alineada con estas necesidades y sobre todo que defienda las decisiones de cada cliente, cediéndole el control, respetándolo y sin reglas obsoletas», ha indicado el consejero delegado.

Más tráfico durante la alerta sanitaria

En cuanto a la alerta sanitaria provocada por la epidemia del coronavirus, García ha destacado que la compañía ha respondido de manera exitosa a esta situación tan excepcional.

Según ha afirmado, el Grupo Euskaltel ha hecho frente a un fuerte aumento del tráfico sin disrupciones, dimensionando en cada momento la capacidad de la red para mantener una buena experiencia de usuario, con un equipo humano de más de 800 profesionales dedicados 24x7 al óptimo funcionamiento de la red.

Además, se han aumentado los servicios de telecomunicaciones ofrecidos de manera gratuita para ayudar a los clientes durante el confinamiento.

Con respecto a los patrones de uso de la red durante el período de confinamiento, Euskaltel ha constatado un 65% de incremento de tráfico de voz fija, un 71% de tráfico de datos a través de red fija y un 32% de consumo de televisión bajo demanda.