La Fiscalía de Ucrania investiga al expresidente Petro Poroshenko por supuestamente ordenar al jefe de la Inteligencia militar exterior que designase a un conocido como su «número dos» en el año 2018, cuando era jefe de Estado, lo que podría derivar en un posible arresto.

Los investigadores consideran que se no se respetaron los protocolos para la designación, por lo que el antiguo mandatario, de 54 años, podría enfrentarse a una pena de hasta diez años de cárcel.

El expresidente, que llegó al poder tras el golpe del Maidán apoyado por Occidente y ahora diputado, ha insistido tras las investigaciones por presunto nepotismo en que las actuales autoridades persiguen al «líder de la oposición».

«Lo que ocurre ahora no tiene nada que ver con (...) la democracia o una investigación penal», ha declarado ante un grupo de seguidores

Poroshenko ha acusado a su sucesor, Volodimir Zelenski, de ordenar procesamientos en su contra. Hay más de 20 investigaciones preliminares abiertas contra él por delitos que van desde prevaricación, contrabando de objetos, culturales, a evasión fiscal, corrupción y alta traición.