El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Heiko Maas, ha recordado este lunes a sus compatriotas que deben afrontar las decisiones sobre sus vacaciones estivales de este año con precaución y que todavía hay países a los que se recomienda no viajar.

Concretamente, ha comentado que a la reapertura de fronteras que Alemania ha comenzado a aplicar la pasada madrugada todavía no le acompaña la supresión de la recomendación de no viajar a estos cuatro destinos: Noruega, Finlandia, Suecia y Estado español.

El Gobierno de Angela Merkel decidió el 10 de junio prolongar hasta el 31 de agosto la recomendación de no viajar al extranjero para todos los países a excepción de los socios comunitarios –menos el Estado español–, los asociados a Schengen –menos Noruega– y Gran Bretaña, con la intención de levantarla para estos últimos este lunes.

Sin embargo, Maas ha aclarado que de momento la recomendación sigue en pie para esos cuatro estados.

La excepción de Illes Balears

Paradójicamente, estas declaraciones se producen el mismo día en el que comienza una prueba para trasladar a turistas alemanes a destinos en Illes Balears. Maas precisó que la situación respecto al Estado español cambiará «de aquí a una semana».

El experimento aprobado por el Gobierno español y recogido en el Boletín Oficial del Estado (BOE) contempla una ruta que permitirá viajar hasta a 10.900 personas procedentes de Alemania que no tendrán que pasar cuarentena.

Los 47 vuelos programados comenzarán a llegar a estas islas mediterráneas a partir de este mismo lunes. Los dos primeros llegarán a Mallorca desde Frankfurt y Düsseldorf.

No habrá vuelos de retorno especiales

«Viajar lo hace uno siempre bajo la propia responsabilidad, independientemente de que haya una pandemia de coronavirus u otra situación de crisis», ha resaltado el ministro alemán, quien ha indicado que en los países donde haya rebrotes o cierre de fronteras habrá apoyo consular a los nacionales que hayan viajado allí.

Pero ha puntualizado que lo que no habrá será aviones fletados por las autoridades alemanas, sino que se tendrían que utilizar conexiones regulares para afrontar eventuales repatriaciones de ciudadanos desde esos países.

«Aquél que piense que vamos a poder pasar unas vacaciones como las pasábamos en el pasado se va a llevar este verano una sorpresa», ha advertido Maas.