La candidata a lehendakari de Elkarrekin Podemos-IU, Miren Gorrotxategi, ha apostado por «blindar» la sanidad pública en los presupuestos de Lakua y aumentar la plantilla de Atención Primaria y Enfermería de Osakidetza. Para ello, ha propuesto un plan de gasto de 4.000 millones de euros en los próximos cuatro años que permita afrontar los problemas de salud diarios y posibles crisis sanitarias.
En un acto electoral en Durango, junto al también candidato a las elecciones del 12 de julio Iñigo Martínez, Gorrotxategi ha advertido de que, «si gobierna la derecha seguro que los servicios públicos serán los primeros perjudicados», entre ellos la sanidad.
La candidata ha recordado las concentraciones que realizaron ante los centros de Osakidetza este pasado viernes los trabajadores del servicio de salud para denunciar los recortes de los últimos años. Según ha indicado, si Elkarrekin Podemos-IU gobierna, «uno de los primeros objetivos será reforzar la sanidad pública y blindarla en los presupuestos, aumentar la plantilla de Atención Primaria y enfermería de Osakidetza y dignificar sus condiciones laborales».
Para ello, plantea un plan de gasto de 4.000 millones de euros para los próximos cuatros años porque, según ha remarcado Gorrotxategi, «no basta con aplaudir» a los trabajadores de la sanidad, sino que «tenemos que estar preparados para poder responder a los problemas de salud diarios y a cualquier crisis sanitaria que pudiera surgir».
En este sentido, ha advertido de que los trabajadores de Atención Primaria «llevan años denunciando que su situación es cada vez más precaria» y ha recordado que, en este momento, este nivel de atención constituye «la primera barrera de contención» contra el coronavirus.
Por otro lado, ha apostado por incluir las residencias de mayores dentro del sistema sociosanitario y dignificar las condiciones laborales de sus plantillas, al igual que las de las empleadas de hogar y del servicio de atención domiciliaria.
La gestión, a manos públicas
Por su parte, Martínez ha alertado de que los sindicatos de Osakidetza denuncian que «la interinidad es del 40%», que, según ha indicado, «tienen un nombre: 40 años de gestión del PNV». Asimismo, ha reivindicado la sanidad pública porque «no podemos permitir que la desigualdad condicione el acceso a la sanidad», pero también porque «es infinitamente más barata que la privada».
Por este motivo, ha asegurado que la coalición que representa trabajará para «desmontar las derivaciones a la sanidad privada» y la externalización de servicios de Osakidetza como ambulancias y limpieza. «Para devolver la gestión de todos los servicios de salud a manos públicas», ha afirmado.