En rueda de prensa, representantes de Steilas han advertido de que «se avecina un curso sin precedentes y un reto que exige un compromiso firme», por lo que, a dos semanas para que comience el nuevo curso, han reiterado su llamamiento al Departamento de Educación de Lakua para que «colabore y busque consensos».
Tras señalar que el sistema educativo «nunca antes ha vivido una situación tan grave como esta», han señalado que, «para hacer frente al caos generado por el covid-19 es imprescindible dotar a las escuelas de planificaciones acordadas y de recursos negociados».
En ese sentido, han reconocido que el documento ‘Medidas de prevención de riesgos laborales en los centros educativos de la Comunidad Autónoma Vasca’ publicado por el Gobierno en julio puede ser «un punto de partida interesante para hacer frente al riesgo de exposición al covid-19», pero han advertido de que «su cumplimiento no será posible si no hay más personal en los centros escolares».
Desde Steilas han recordado que Educación propone, entre otras actuaciones, un plan de contingencia, una memoria de horarios (elaboración escalonada de entradas y salidas, que recoja la distribución de la señalización y circuitos de circulación, preferentemente en el plano del centro), ampliar las franjas horarias de entrada y salida del centro, estudiar la sectorización o compartimentación del espacio para crear aulas con menos alumnado, y la coordinación con entidades locales que puedan ofertar espacios públicos municipales.
Asimismo, Lakua plantea la organización en función de las características y dimensiones de los espacios de comedor, que el centro disponga de un aula para poder aislar los casos que puedan generar síntomas, guardar un registro de la distribución de los espacios del centro, preferentemente en el plano, que distribuya los grupos escolares y actividades programadas con un aforo determinado, evitando aglomeraciones innecesarias, el diseño e implantación de actividades de educación para la salud, y, en el ciclo 0-3, la desinfección del cambiador tras el cambio de pañal y organización de salas de uso común.
Protocolo e intenciones
En ese sentido, desde Steilas han preguntado al Departamento de Educación si «cree realmente que la plantilla actual es suficiente para llevar a cabo las medidas contempladas, para proteger la salud en las escuelas y garantizar las escuelas presenciales». De ser así, han advertido, «no contemplaría en sus planificaciones otro escenario que el de la asistencia de los alumnos», cuando «la realidad es que, si no se dota de recursos, el protocolo no es más que un documento lleno de intenciones y propuestas, dicho de otro modo, que a escasas tres semanas de que comience el curso escolar el Gobierno Vasco no propone un plan real».
Según Steilas, de media se necesitaría «un mínimo de cinco trabajadores más en cada escuela, en total un mínimo de 3.000» y «otros tantos para poder crear grupos más pequeños», por lo que «se necesitarían al menos 6.000 trabajadoras más para poder proteger la salud y garantizar el derecho a la educación en la escuela pública».
Además, el sindicato considera «imprescindible» la presencia de personal de enfermería en los centros educativos para «realizar valoraciones y seguimientos, detectar casos, y encauzar situaciones sanitarias». Todo ello, han indicado los responsables de Steilas, exige «aumentar los presupuestos para aumentar las plantillas y poder disminuir las ratios del alumnado» y, en ese sentido, han reiterado su petición de que en los presupuestos se destine el 6% del PIB a la educación pública.
Responsabilidad
Por otro lado, Steilas ha denunciado que, ante la situación creada por el covid-19, el Departamento de Educación del Ejecutivo autonómico «ha dejado recaer sobre los centros educativos toda la responsabilidad que en realidad compete al propio Departamento». Ante esta situación, ha dicho, «es imprescindible proteger jurídicamente al personal, especialmente a los equipos directivos». Por ello, ha solicitado al Departamento de Educación que publique un documento que «garantice la protección jurídica del personal de los centros públicos».
Además, ha considerado también «imprescindible» que se aplique un protocolo de protección de la salud de los trabajadoras que proteja especialmente a las personas más vulnerables ante el covid-19.
«La única forma de garantizar el derecho a la educación es la escuela presencial, en todas las etapas y sin excepciones. Porque la escuela presencial es la única que garantiza la igualdad de oportunidades», ha defendido Steilas, para considerar que, «en lugar de estar discutiendo sobre la idoneidad de los diferentes escenarios, deberíamos estar hablando de las condiciones e inversión que se deben realizar para poder garantizar las clases presenciales».
Por último, Steilas ha subrayado que la educación «debe ser un servicio esencial y deben garantizarse los recursos humanos y materiales necesarios, que garanticen unas condiciones sanitarias que eviten volver a la situación de confinamiento que nuevamente castigaría al alumnado en situación de mayor vulnerabilidad».