ACUNSA GIPUZKOA BASKET 77 - HEREDA SAN PABLO BURGOS 90

Gipuzkoa Basket ha vuelto a jugar como local en esta Liga ACB 2020/21, pero ha tenido que desplazarse a Burgos, la cancha de su rival, dado que Illunbe sigue de obras. Y como ante el Real Madrid en Miribilla, ha dado una imagen la mar de buena, sobre todo de la mano de Jaime Echenique –18 puntos y una presencia constante en la zona hasta que ha quedado eliminado por faltas– y Johnny Dee –14 puntos, mos mismos que Magarity–, así como un juego colectivo francamente aseado, llegando a ir por delante en el marcador durante más de 20 minutos.

Ahora bien, el partido se le ha hecho demasiado largo y el último cuarto ha supuesto el despegue definitivo de un San Pablo Burgos que ha mostrado muchos recursos –16 tantos y 6 rebotes de Jasiel Rivero; 22 puntos de un McFadden que ha anotado seis triples; 17 puntos y 6 rechaces de Horton– ante un rival que le ha obligado a poner esos recursos sobre el tapete.

A golpe de triple, los pupilos de Marcelo Nicola han sorprendido gratamente, o no tan gratamente a San Pablo Burgos que se ha encontrado con un Johnny Dee imparable y un 23-7 en el marcador, porque al acierto en ataque se le ha sumado un orden defensivo insólito para un equipo armado a la carrera y casi a última hora.

Los de Joan Peñarroya, con Xavi Rabaseda como estilete, han empezado a reaccionar hacia la parte final del primer cuarto, pero se han topado con un Echenique muy eficiente en la pintura, de forma que los donostiarras han conseguido terminar el primer cuarto con un 29-20 favorable y dejando muy buenas sensaciones ante un rival llamado a estar en la zona npble de la Liga ACB. desde luego, la diferencia de valoración, 39 a 18 para los guipuzcoanos, ha mostrado bien a las claras el buen hacer de los de Marcelo Nicola en la puesta en escena.

El partido se ha puesto mucho más duro con el segundo asalto, algo esperable visto lo visto en los diez primeros minutos. Es ahí cuando el conjunto burgalés ha apretado, sobre todo cuando Horton y McFadden han entrado en juego, y valiéndose de los minutos de descanso de Johnny Dee y Jaime Echenique. Pese a que la entrada de estos dos ha supuesto un respiro, pasando del 33-29 a un 38-29 más cómodo, el acierto en el triple de los de Peñarroya ha comprimido mucho el resultado, alcanzándose los vestuarios con 42-41, fruto de una canasta final de Pere Tomàs, a pase de Faggiano, para mantener a los donostiarras por delante.

Perdiendo la ventaja

Con un partdo cada vez más físico, San Pablo Burgos ha ejercido el acoso y derribo del liderato, aunque sin mucho acierto, fruto de la presión defensiva donostiarra. La cruz de esa moneda han sido los tiros libres que los de Marcelo Nicola han ido concediendo a jugadores tan seguros como Vitor Benite y Alex Renfroe, de forma que el cuadro castellano ha conseguido ponerse fugazmente por delante, y sobre todo, Johnny Dee ha cometido su tercera falta.

Con todo, Echenique, Okouo, Magarity o Pere Tomàs se han conjurado para mantener a Gipuzkoa Basket por delante, también con la inestimable ayuda de varias pérdidas absurdas de su rival. a favor o en contra del marcador, lo mejor que se puede decir de los guipuzcoanos es que nunca se han salido de su plan de partido, consiguiendo sacar del partido a jugadores como Benite y Kravic, muy desacertados e incómodos en todo momento. Eso sí, hasta el propio Marcelo Nicola se ha desesperado tras un par de errores de bulto bajo canasta de sus muchachos, castigados por un Renfroe que ha terminado de voltear el marcador hasta un 54-57, preludio del un final de tercer cuarto con un 56-59 en el luminoso, en un reparto muy coral de aciertos y errores.

McFadden y Rivero deciden

Por algún lado se tiene que romper el cántaro, y dos triples de McFadden han empezado a quebrar el buen hacer de Gipuzkoa Basket en el arranque del último cuarto. Con 56-66, Nicola no ha tenido otra que parar el partido, porque el 0-7 que ha tenido que «comerse» su equipo ha amenazado una sangría que se ha alargado con una bandeja de Horton antes de que un triple de Span haya podido añadir puntos a su equipo.

Como es normal, Gipuzkoa Basket no ha comandado el duelo durante más de 20 minutos para rendirse sin luchar, y sendos triples de Dee y Pere Tomàs han mantenido a los donostiarras todavía en la pelea, a pesar de que Jasiel Rivero también se ha sumado al «coro» de anotación castellano. Con todo, un triple de Johnny Dee ha elevado el 65-72, obligando a Joan Peñarroya a parar el partido, porque todavía restaban casi cinco minutos por jugarse.

Sin embargo, Gipuzkoa Basket ha perdido un par de claras ocasiones de arrimarse en el marcador, con tiros debajo de canasta de Dee o Xabi Oroz que se han salido, o triples liberados de Magarity o Radoncic que no han entrado. En cambio, Jasiel Rivero y McFadden se han combinado para dar al partido un golpe casi de gracia con un parcial de 0-5, obligando a Nicola a buscar un tiempo muerto a la desesperada con 65-77 en el luminoso, pero con menos de tres minutos para disputarse.

Pero Jasiel Rivero ha dicho que se acabó lo que se daba. El pívot  cubano se ha erigido en el rey de los últimos minutos y ha culminado un nuevo parcial «visitantes» de 2-7 con un triple para elevar un 67-84 que ha certificado la derrota de un Gipuzkoa Basket que ni mucho menos ha estado tan lejos de su rival, pero al que el partido se le ha hecho largo. Con todo, un último esfuerzo guipuzcoano ha supuesto un parcial de 5-0. Una llamada al orden de Joan Peñarroya –un grito, simplemente– ha bastado para que entre Benite, Cook y Horton hayan terminado de cerrar el partido.

Ahora bien, a poco que el estado físico de los de Marcelo Nicola dé para que mantengan el nivel durante los 40 minutos, el cuadro donostiarra no será para nada una comparsa en esta Liga ACB 2020/21 de 19 equipos.