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En libertad los tres ciudadanos vascos detenidos el lunes por la Guardia Civil

Imanol Jaio, Ekhiñe Eizagirre y Kepa Arkauz han quedado en libertad con medidas cautelares tras pasar por delante del juez de la Audiencia Nacional. No pueden abandonar el Estado español y deberán presentarse en los juzgados semanalmente.

Kepa Arkauz, detenido por la Guardia Civil. (Raul BOGAJO | FOKU)
Kepa Arkauz, detenido por la Guardia Civil. (Raul BOGAJO | FOKU)

Ekhiñe Eizagirre, Kepa Arkauz e Imanol Jaio han quedado en libertad con medidas cautelares esta misma mañana, después de pasar por delante del juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, quien les mantiene investigados por «tenencia de explosivos con fines terroristas».

Los autos no hacen referencia alguna a las eventuales pruebas que habría presentado la Guardia Civil contra ellos. Es este cuerpo policial el que solicitó a la Audiencia Nacional la detención, a lo que accedió el juez Moreno aunque planteando algunas limitaciones, como que los registros se practicaran entre las 9.00 y las 23.00, no de madrugada.

El instituto armado español no mostró duda alguna de la culpabilidad en su nota de prensa de lunes: «La Guardia Civil detiene a tres personas como responsables de un depósito de explosivos de ETA», se titulaba. Destacaba además que sobre Jaio se dirigiría una acusación de «pertenencia» a ETA «al no haber sido investigado anteriormente de este delito», contrariamente a Arkauz e Izagirre, que ya cumplieron condena de cárcel por ello.

Sin embargo, la Audiencia Nacional ha tomado la misma decisión para los tres. El auto de Moreno deja además la acusación inicial contra Jaio en «tenencia de explosivos».

El magistrado ha adoptado esta resolución de puesta en libertad a petición de la Fiscalía tras tomar declaración a los tres arrestados, que se han negado a contestar a las preguntas del juez y del fiscal.

El juez considera que «la nacionalidad española» de los investigados y «el arraigo personal y familiar» son factores que «hacen suponer que no existe riesgo de fuga». Asimismo, entiende que la libertad «nada puede perjudicar a la investigación». Pese a ello, se les ha impuesto la prohibición de salir del Estado español, retirándoles el pasaporte, y la obligación de comparecer en el juzgado semanalmente.

Tras ser detenidos el lunes y trasladados al cuartel de Tres Cantos en Madrid, ayer pudieron ser visitados por su abogado, al no estar incomunicados. Según le contaron, el trato que recibieron fue «correcto». Los tres se negaron a declarar ante la Guardia Civil.

La operación policial, ordenada por el juez Ismael Moreno, se basa en el hallazgo el año pasado de un zulo en la localidad alavesa de Arraia-Maeztu por la Ertzaintza, con material que tendría más de diez años.