La Euroliga regresa al Buesa Arena para TD Systems Baskonia que quiere sumar como local después de salir victorioso de sus dos últimas visitas a Olympiacos y Anadolu Efes. A partir de las 21.00 de este jueves los hombres de Dusko Ivanovic reciben a Maccabi de Tel Aviv, todo un clásico de la competición continental, en un duelo de dos equipos con peores resultados que sensaciones hasta la fecha.

«Estamos en un buen momento y así queremos seguir, jugando con confianza en ataque y con agresividad en defensa. Sabemos que el Maccabi es un gran equipo, con muchos americanos y un buen entrenador, y que vendrá aquí para ganarnos. Pero si jugamos como sabemos, podemos ganarles», ha declarado Achille Polonara en la previa del encuentro.

Los gasteiztarras ocupan la novena plaza con un balance de 6-5, por primerra vez en positivo, luego de sus victorias en Atenas y Estambul, hasta el punto que ya iguala a los equipos del Top 8. El combinado baskonista vive uno de sus momentos más dulces de la temporada. Con cuatro victorias en los últimos cinco partidos europeos y Pierria Henry como jugador más valorado, acompañado por jugadores en estado de gracia como Alec Peters o Achille Polonara, los hombres de Ivanovic pelearán por hacer frente al conjunto de Tel Aviv, un rival que nunca suele ser bienvenido por estos pagos, aunque en esta ocasión, las circunstancias sanitarias han aplacado bastante el habitual paso atronador de la escuadra hebrea y su séquito.

El Maccabi, decimoquinto

El Maccabi de Tel Aviv llega a Zurbano con un triste balance de 4-8, ocupando la decimoquinta plaza de la Euroliga. El equipo que entrena Ioannis Sfairopoulos no pasa por su mejor momento, ya que cuenta con tres derrotas en sus cuatro últimos partidos.

Pese a los resultados negativos, es indudable que la escuadra israelí, un año más, ha sido diseñada para estar entre los mejores de la competición. Maccabi cuenta en sus filas con jugadores de máximo nivel como Scottie Wilbekin, que promedia 18 puntos por partido, o figuras de renombre como Ante Zizic o Angelo Caloiaro, a la espera de que Dragan Bender, una de las esperanzas de la generación croata de 1997, absolutamente decepcionante en su paso por la NBA, explote de una buena vez.

Son 29 las ocasiones en las que el combinado gasteiztarra se ha medido al club israelí, con un balance favorable de 16 triunfos y 13 derrotas. Todo un clásico europeo entre dos equipos que volverán a verse las caras una vez más por llevarse un valioso triunfo. Ahora bien, la pasada campaña Wilbekin se exhibió con 20 puntos y seis triples en la paliza que la escuadra israelí infligía en Zurbano, 83-113.