«Herri bat, amets bat», rezaba una de las pancartas desplegadas en las gradas de Merkatondoa. Y el sueño del Cantolagua, al menos, ha durado durante media hora. Tiempo suficiente para vivir la experiencia histórica de tutearse sobre el verde con un Primera de manera oficial y única en la trayectoria deportiva de la escuadra zangozarra.
Pese a las restricciones por la pandemia –hasta mañana el Departamento de Salud foral no permite la presencia de aficionados en las gradas de los estadios–, casi un centenar de aficionados del Cantolagua no han dudado en echarse a la carretera y recorrer los 85 kilómetros que separan Zangoza de Lizarra para mostrar su apoyo al club.
Muchos de ellos han participado en el recibimiento al equipo a las afueras del campo más antiguo de Nafarroa, si bien la Policía Foral les ha requisado las bengalas que tenían previsto prender para darle un tono de colorido y ambiente a los momentos previos del choque.
Ante la imposibilidad de acceder a los graderíos, la gran mayoría han optado por ubicarse en la ladera exterior norte limítrofe al estadio lizartarra, desde la que han animado a los suyos con continuos cánticos.
Algunos privilegiados sí que han podido acceder al campo, entre ellos varios socios veteranos del Cantolagua, además de representantes de ambos clubes –ha estado presente el máximo dirigente rojillo, Luis Sabalza, originario de Zangoza–, federativos y autoridades.
Distancia entre profesionales y aficionados
Lo de menos ha sido el aspecto deportivo, habida cuenta de la enorme diferencia previa entre una plantilla profesional y otra amateur conformada en su mayoría con jóvenes de Zangozaldea y que, como reflejó el presidente del Cantolagua, Alberto Ozkoidi, a este medio «madrugan cada día» para ganarse la vida con otro trabajo.
Prácticamente desde el principio, esa brecha ha quedado patente sobre el césped artificial de Merkatondoa, con un bloque zangozarra que ha comenzado un tanto nervioso y permitiendo una clara ocasión para el Valladolid en el segundo minuto que Adrián Izco ha sacado bajo palos.
Poco a poco, los locales se han ido asentando y plantándole cara al cuadro visitante, cuyo mayor peligro ha llegado por las arrancadas de Toni Villa y la calidad de Jota. Los de Javier Pascual, ascendidos esta campaña a Tercera, se han mantenido ordenados a la hora de contener a un conjunto pucelano que lógicamente ha llevado la iniciativa.
El equilibrio ha acabado de romperse a la media hora de juego cuando Toni Villa se ha aprovechado de un rechazo del guardameta Pablo Arboniés tras disparo desde fuera del área de Jota. Este último ha sido el autor del 0-2 rompiendo el fuera de juego, colándose por el eje de la zaga navarra para marcar por bajo ante la salida del cancerbero zangozarra.
El inicio de la segunda parte ha traído consigo otro jarro de agua fría para los "locales", pues un centro por la izquierda de Raúl Carnero ha sido cabeceado a las redes por Zalazar, reemplazo en la delantera pucelana al descanso.
El Cantolagua ha intentado amortiguar el empuje ofensivo vallisoletano, pero el cansancio ya ha comenzado a hacer mella en el equipo aficionado, lo que ha llevado a que los foráneos jugasen con mayor comodidad y generasen más ocasiones, materializando de nuevo Toni Villa el cuarto gol tras falta botada desde la izquierda por Míchel.
Lo único que le ha faltado al equipo zangozarra para acabar con un mejor sabor de boca es haber anotado y ha estado muy cerca de ello. El meta visitante Roberto se ha liado en una salida fuera de su marco y ha dejado el cuero en poder del recién entrado al terreno de juego Jon Pérez que, a la media vuelta, no ha terminado de encontrar portería.
Por contra, el Valladolid ha estado más acertado en el tramo final, redondeando su pase con un póker de dianas, la última materializada por Alcaraz llegando desde atrás en una rápida contra castellana.
Como no podía ser menos, el Cantolagua ha tenido un bonito gesto al final del choque y ha saludado desde el medio del campo a esos aficionados que se han desplazado hasta Lizarra, como postrero broche a una experiencia que tardarán en olvidar.
Ficha técnica:
Cantolagua: Pablo Arboniés, Julen Uriz (Juli, m.46), Ibai Martínez, Luis Ongay, Adrián Izco, Beñat Otxandorena, Ander Blanco, Adrián Etxeberri (Pablo Ayesa, m.74), Daniel Navarrete (Galisteo, m.65), Javier Ayesa (Jon Pérez, m.74) y Carlos Arzelus (Txipi, m.46).
Valladolid: Roberto, Luis Pérez (Alcaraz, m.77), Miguel Rubio, El Yamiq, Raúl Carnero, Fede San Emeterio (Roque Mesa, m.63), Míchel, Waldo, Jota (Sergio López, m.63), Toni Villa y Sergio Benito (Zalazar, m.46).
Árbitro: De Burgos Bengoetxea (vizcaino). Amonestó a Miguel Rubio (m.41) y Ongay (m.67)
Goles: 0-1, m.31: Toni Villa. 0-2, m.37: Jota. 0-3, m.55: Zalazar. 0-4, m.65: Toni Villa. 0-5, m.88: Alcaraz.