El 21 y 22 de enero tendrá lugar un nuevo juicio contra ciudadanos vascos en la Audiencia Nacional, esta vez contra Galder Barbado y Aitor Zelaia, dos jóvenes acusados de «depósito y tráfico de armas». La Fiscalía pide una pena de ocho años de prisión y otros siete de libertad vigilada para cada uno de ellos.

Este proceso judicial comenzó en febrero de 2019, cuando agentes de la Ertzaintza detuvieron a Barbado en Amurrio y a Zelaia en Gasteiz por orden de la Audiencia Nacional, que les relaciona con un bidón encontrado en 2018 que al parecer contenía «material pirotécnico para la fabricación de explosivos caseros».

«Se nos pone la carne de gallina al observar la maquinaria judicial empleada contra Galder y Aitor, que como tantos y tantas ciudadanas vascas van a ser juzgados por el sucesor del Tribunal de Orden Púbico, la Audiencia Nacional, esto es, sin ninguna garantía y en una jurisdicción de excepción», han señalado Ioritz Iglesias y Maddalen Muguruza, integrantes de la plataforma "Ankerkeriari STOP! Aitor eta Galder aske!".

«Este pueblo ansía la libertad: una sociedad libre con personas libres. No podemos dejar que se lleven a Galder y a Aitor. No podemos dejarles», han añadido antes de anunciar las movilizaciones convocadas para mostrar «toda nuestra solidaridad y apoyo» a los jóvenes. «Exigimos que paren el proceso iniciado contra ambos», han manifestado.

Manifestación en Gasteiz

Así, se ha puesto en marcha una campaña de adhesión en la web ankerkeriastop.eus, y se ha convocado una manifestación que tendrá lugar el 16 de enero en Gasteiz. Partirá a las 17.30 desde la plaza de la Virgen Blanca. Además, tendrán ligar diferentes movilizaciones durante los días que dure el juicio en Amurrio y en la capital del herrialde.

«Advertimos de la enorme dimensión que tiene este juicio, ya que no solo atenta contra dos jóvenes, sino que también supone un ataque premeditado contra los deseos, anhelos y sueños de toda la sociedad. No podemos dejarles», han destacado, y han reclamado una «sociedad en la que todas las personas tengan los mismos derechos».

Doble vara

No en vano, «en el municipio de Amurrio, sin ir más lejos, este principio no se aplica: que un policía dispare contra la vivienda de una familia abertzale no tiene consecuencias políticas ni penales; sin embargo, a Galder y Aitor los metieron en la cárcel utilizando pruebas difusas y ahora están inmersos en un proceso kafkiano que puede desembocar en largas condenas y en una situación de prisión excepcional».

«Este pueblo demanda justicia; una justicia que ayude a sanar las heridas que nos hemos hecho; una justicia que impulse la convivencia», han aseverado tras censurar que «cuando se cumplen diez años del contexto actual, diversos estamentos fácticos siguen enrocados con el fin de mantenernos anclados al pasado: en vez de vaciar las cárceles continúan empeñados en llenarlas, aplicando políticas injustas basadas en la venganza».