La Justicia chilena ha condenado este jueves a siete expolicías y un abogado por su implicación en la muerte del joven mapuche Camilo Catrillanca, un crimen que conmocionó al país en noviembre de 2018 y despertó infinidad de críticas contra el cuerpo policial de Carabineros.
El Tribunal Oral en lo Penal de Angol, en la Araucanía, ha declarado al exuniformado Carlos Alarcón culpable de «homicidio» por efectuar los disparos que provocaron la muerte de Catrilanca cuando viajaba en tractor con un adolescente en el sur de Chile, mientras que el resto de involucrados han sido condenados por «apremios ilegítimos, obstrucción a la investigación o disparo injustificado», entre otros delitos.
El caso Catrillanca, marcado desde el comienzo por las irregularidades y las versiones contradictorias de los condenados, hizo temblar los cimientos del cuerpo de seguridad, fue el primer mazazo al Gobierno de Sebastián Piñera e intensificó el conflicto mapuche, que enfrenta desde hace décadas a este pueblo originario con empresas agrícolas y forestales que buscan instalarse en sus tierras.
El joven mapuche falleció por un disparo que recibió por la espalda el 14 de noviembre de 2018 en la comunidad de Temucuicui, comunidad mapuche ubicada a unos 600 kilómetros al sur de Santiago, en la llamada «zona roja» del conflicto, durante un operativo llevado a cabo por una unidad del Grupo de Operaciones Policiales Especiales de Carabineros llamada «Grupo de Reacción Táctica», y bautizada por la prensa como «Comando Jungla». Este grupo, formado por carabineros entrenados en Colombia y cuyo único cometido es combatir la resistencia del pueblo originario, apenas llevaba unos meses operando en la zona.
En un principio, los agentes condenados declararon que habían sido emboscados y que el vehículo de Catrillanca se había cruzado en el tiroteo. El peritaje de la Fiscalía, sin embargo, demostró que esta versión era falsa y Alarcón, el autor del disparo, admitió luego que el abogado imputado, Cristián Inostroza, les indicó que entregaran una versión falsa de lo acontecido.
«Las pruebas del juicio establecen que idearon de forma previa una estrategia de ir a declarar a la Fiscalía y, en definitiva, aportaron falsos antecedentes a la investigación», sentencia el juez Francisco Boero.
Imágenes de lo sucedido
En un comienzo, la institución de Carabineros negó la existencia de unas grabaciones tomadas por la cámara que uno de los agentes portaba en el casco y que semanas después se difundieron por los medios locales.
El vídeo muestra que Catrillanca recibió disparos de un fusil de guerra y, tras el impacto, permaneció varios minutos inmóvil en el asiento del tractor.
Catrillanca era un dirigente reconocido en la comunidad, nieto del lonko (líder Mapuche) Juan Catrillanca. Fue dirigente del movimiento estudiantil de la zona y partícipó en actos de recuperación de tierras en la comuna de Ercilla.