La iniciativa SOS Presoak Covid-19 (integrada por Salhaketa Nafarroa, Etxerat, Sare y Altsasu Gurasoak) ha denunciado hoy en el Parlamento navarro que Instituciones Penitenciarias no ha implementado las medidas adecuadas para hacer frente a la pandemia. De este modo, Libertad Francés, portavoz de la iniciativa, ha destacado que actualmente los presos que salen con permiso de la cárcel de Iruñea tienen que cumplir con aislamiento de una duración indeterminada al regresar a prisión. «Es una vulneración de derechos que se mantiene. Es asimilable al primer grado, ya que los presos comen en la celda, no tienen actividades y están sin contacto con nadie», ha explicado Francés, que ha destacado que esta medida se aplica «de forma sistemática».
Junto a ello, ha recordado lo expuesto en el informe elaborado por SOS Presoak Covid-19, que denuncia que se han restringido las comunicaciones hasta el punto de que hay presos que no han estado con sus allegados desde agosto. Actualmente, sigue sin haber vis a vis en la cárcel de Iruñea, tal y como denunciaron en el informe presentado en octubre.
Francés también ha denunciado que aunque ahora sí se facilitan mascarillas, ha habido fases de la pandemia en las que no se han entregado. Actualmente, a los presos de Iruñea se les entrega una mascarilla para siete o diez días únicamente para quienes tienen contacto con otros módulos. Para el resto, se venden a un precio de tres mascarillas por 55 céntimos.
Presos navarros a Iruñea
La portavoz de esta iniciativa también ha incidido en la situación de los 184 presos navarros que están encarcelados fuera de Nafarroa. Fueron perjudicados porque no pudieron tener permisos ni visitas por el confinamiento perimetral provincial, aunque ahora se han planteado las visitas como una excepción. Actualmente, en 30 de las prisiones en las que se encuentran los presos navarros no hay comunicaciones vis a vis, mientras que en once sí las hay.
Mikel Mundiñano, también portavoz de la iniciativa, ha recordado que organismos internacionales han recomendado las excarcelaciones como medida para hacer frente a la pandemia, a lo que Instituciones Penitenciarias ha hecho caso omiso, implementando únicamente medidas que suponen restricciones en los derechos de los presos.
Arantza Izurdiaga, parlamentaria de EH Bildu, se ha mostrado muy crítica con la «gestión nefasta» de Instituciones penitenciarias y ha reclamado que, de una vez por todas, Nafarroa asuma la competencia de sanidad penitenciaria. Ha destacado que los presos tienen derechos, entre los que se encuentra el de cumplir condena en la prisión más cercana a su domicilio.
Marisa de Simón (I-E) también ha destacado que hay que terminar con la existencia de presos navarros fuera de la cárcel de Iruñea «porque vulnera los derechos humanos». Ha abogado por su inmediato traslado a la prisión navarro.
Iñaki Iriarte (Navarra Suma) ha reconocido que los presos tienen derechos, pero ha destacado que las medidas implementadas se han realizado en el marco excepcional de la lucha contra el covid-19. «No se toman por crueldad, ni por castigo», ha señalado.
Junto a ello, ha añadido que «la excarcelación masiva es arriesgada», destacando que en el Estado español hay 3.500 presos por homicidio y 3.300 por delitos contra la libertad sexual. Ha señalado que «el acercamiento se ha de favorecer en la medida de lo posible», pero ha puntualizado que «hay situaciones en la que no es recomendable», entre las que ha citado a los presos de «organizaciones terroristas o mafiosas».
Virginia Magdaleno (PSN) ha respaldado las medidas implementadas por Instituciones Penitenciarias y ha defendido la posibilidad de que se vacune a presos y funcionarios al considerarlos población vulnerable. Junto a ello, ha recordado que en noviembre se anunció como «inminente» el traspaso de la competencia de la sanidad penitenciaria a Nafarroa.
Blanca Regúlez (Geroa Bai) ha reclamado que se cumpla la legislación penitenciaria para que los presos navarros estén en la cárcel de Iruñea.
Ainhoa Aznárez (Podemos-Ahal Dugu) ha subrayado la importancia de la moción aprobada por el Parlamento navarro (con la única excepción de Navarra Suma) a favor del traslado de los presos navarros a Iruñea y ha recordado que se lleva años trabajando para que la competencia de la sanidad penitenciaria llegue a Nafarroa.