Amaia  U. Lasagabaster
Kazetaria, kirol informazioan espezializatua / Periodista, especializada en información deportiva

El Eibar toca fondo en Elche (1-0)

Un cabezazo de Dani Calvo en la única ocasión local del primer tiempo ha dejado los tres puntos en el Martínez Valero. Ya son siete las jornadas consecutivas sin ganar del Eibar (sumando 2 puntos de 21 posibles), que hoy descendería a Segunda. Estadísticas del partido

Pozo se hace con el balón ante Rigoni en presencia de Pedro León. (Chimo De Haro/LOF)
Pozo se hace con el balón ante Rigoni en presencia de Pedro León. (Chimo De Haro/LOF)

El Eibar desperdicia otro cartucho en Elche. Y, como en las dos semanas anteriores ante Osasuna y Valladolid, no uno cualquiera. Los azulgranas han caído ante un rival directo, que pone fin a su mala racha, sale del descenso, les iguala ya a puntos y además se asegura el golaverage tras haberse impuesto también en la primera vuelta. Si la temporada acabara hoy, los azulgranas, que aumentan a siete las jornadas consecutivas sin ganar –han sumado dos puntos de 21–, se irían a Segunda División.

Buena parte del problema en el Martínez Valero, como tantas veces esta temporada, ha estado en las áreas. Al menos en la primera parte, en la que la iniciativa y el dominio territorial han sido del Eibar. También las ocasiones, algunas muy claras. Pero ninguno de los disparos ha acabado en gol. Justo lo contrario de lo que le ha sucedido a su rival.

No había ni saludado a Dmitrovic cuando, recién cumplida la media hora, el Elche ha forzado un córner. Lo ha sacado en corto, Barragán ha centrado sin oposición y un magnífico testarazo de Dani Calvo ha sentenciado a los armeros. Han respondido bien, buscando de nuevo la portería rival pero tampoco ahora les ha acompañado el acierto. Ni el árbitro. Ni sus compañeros en el VAR. Porque en la recta final del primer tiempo Kike García se ha ido al suelo en el área en una acción que parecía penalti y, justo después, Bigas ha recibido un claro sopapo de Barragán que tampoco ha sido castigado.

El partido ha cambiado para mal tras el descanso. Aunque el Elche ha empezado la segunda parte agazapado, la inofensividad de su rival ha acabado animándole a probar. Y le ha cogido el gusto, hasta el punto de que ha ido acumulando ocasiones como para percibir la sentencia más cerca que el empate durante un buen rato. Pero los alicantinos no cuentan con la puntería entre sus virtudes. Como el Eibar que, en la recta final y ya con Muto, Inui, Soares y hasta Aleix García –que apenas había participado en un par de encuentros desde su llegada– ha vuelto a acelerar en busca de un gol que tampoco ahora ha llegado.