Gente cruzando la carretera durante la tormenta de arena. (Noel CELIS/AFP)
Gente cruzando la carretera durante la tormenta de arena. (Noel CELIS/AFP)
Una joven circula en bicicleta durante la tormenta. (Noel CELIS/AFP)
Una joven circula en bicicleta durante la tormenta. (Noel CELIS/AFP)
Edificios del distrito financiero de Pekín bajo la tormenta de arena. (Leo RAMIREZ/AFP)
Edificios del distrito financiero de Pekín bajo la tormenta de arena. (Leo RAMIREZ/AFP)
Imagen de una avenida de Pekín durante la tormenta de arena. (Greg BAKER/AFP)
Imagen de una avenida de Pekín durante la tormenta de arena. (Greg BAKER/AFP)
Una mujer cruza el puente del lago Huahai durante la tormenta. (Noel CELIS/AFP)
Una mujer cruza el puente del lago Huahai durante la tormenta. (Noel CELIS/AFP)
Un cuervo sobrevuela la Ciudad Prohibida durante la tormenta de arena. (Wang ZHAO/AFP)
Un cuervo sobrevuela la Ciudad Prohibida durante la tormenta de arena. (Wang ZHAO/AFP)
Una pareja recién casada posa para su reportaje fotográfico de boda ante la Ciudad Prohibida. (Wang ZHAO/AFP)
Una pareja recién casada posa para su reportaje fotográfico de boda ante la Ciudad Prohibida. (Wang ZHAO/AFP)
Una mujer camina por el exterior de la Ciudad Prohibida. (Wang ZHAO/AFP)
Una mujer camina por el exterior de la Ciudad Prohibida. (Wang ZHAO/AFP)
La Ciudad Prohibida de Pekín. (Noel CELIS/AFP)
La Ciudad Prohibida de Pekín. (Noel CELIS/AFP)

Pekín, envuelta en la peor tormenta de arena en una década

Pekín ha vivido este lunes su peor tormenta de arena en una década que, además, ha disparado los ya altos niveles de contaminación acumulados en las últimas semanas, con visibilidad de menos de un kilómetro, calles prácticamente vacías y una espesa niebla de color marrón que parecía envolverlo todo.

Una tormenta de arena que se originó el domingo en Mongollia ha afectado este lunes a la capital, Pekín, y se ha extendido por toda la región septentrional del país. En consecuencia, el Centro Meteorológico Nacional chino ha emitido una alerta «amarilla» en hasta 12 regiones que, según pronostica, quedarán cubiertas de arena y polvo.

El centro ha advertido de que es probable que la situación se prolongue durante las próximas horas, cuando el viento comenzará a diluirla, aunque podría retornar mañana debido a otras corrientes provenientes del sur.

La tormenta ha provocado que la concentración de partículas PM10 –por ejemplo, el polvo o las cenizas– en el aire alcanzase los casi 10.000 microgramos por metro cúbico en Pekín a primera hora de la mañana. En algunos lugares de la ciudad la visibilidad ha alcanzado cotas tan bajas como los 300 metros.

Pero además, la concentración de partículas PM2,5 –las más dañinas para la salud– en el aire ha llegado a superar los 700 microgramos por metro cúbico, muy por encima del límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), de 25 por un período de 24 horas.

La tormenta ha agravado el índice de calidad del aire de la capital, que ha superado los 2.000 puntos –cuanto mayor es, peores condiciones hay– para asombro de residentes y estupor de las autoridades locales, que se han visto obligadas a pedir a los residentes que suspendieran cualquier actividad al aire libre o a recomendar el uso de máscara protectora. Además, han instado a los ancianos, los niños y las personas que sufren de afecciones respiratorias a no salir de sus casas durante la jornada.

«Esta es la calidad de vida que tenemos en China, parece que viviésemos en Marte», ha comentado a Efe un tendero con gesto de resignación bajo su mascarilla contra la covid, que no obstante no son igual de efectivas contra la contaminación por carecer de filtros.

Otros residentes tiraban de ironía en las redes sociales para hablar de la densa capa de polvo y arena, y comparar las escenas vividas hoy con las de películas apocalípticas como ‘Mad Max’ o ‘Blade Runner’, mientras que empresas como Blueair trataban de aprovechar el momento enviando a sus clientes anuncios sobre sus últimos modelos de purificadores de aire.

Inusual fenómeno

El director del Instituto de Asuntos Públicos y Medioambientales de China (IPE), Ma Jun, se ha mostrado sorprendido por este inusual fenómeno dado que las tormentas de arena habían disminuido en la capital china en los últimos años gracias a diversas medidas de reforestación y plantación de árboles.

«Pekín se encuentra rodeada de zonas secas en las que apenas llueve, como Mongolia Interior, con lo que siempre ha estado expuesta este tipo de tormentas. Es sin duda la peor de los últimos diez años y sorprende por todas esas medidas que se habían tomado», ha explicado.

El experto apunta a que el calentamiento global podría estar provocando que la Tierra «sea más propensa» a que los fuertes vientos arrastren grandes cantidades de arena y polvo de suelos desnudos y secos a la atmósfera.

«La tormenta de arena de hoy se debe principalmente a factores naturales, pero también muestra que nuestro entorno ecológico aún es muy frágil», ha admitido el viceministro del Ministerio de Ecología y Medio Ambiente, Zhao Yingmin.

Diez fallecidos en Mongolia

La tormenta de arena se originó el domingo en Mongolia, donde hasta ahora ha dejado 10 muertes y cientos de desaparecidos, según los departamentos locales de gestión de emergencias.

Las fuertes ráfagas de viento, de entre 18 y 34 metros por segundo, y de nieve provocaron que nueve personas murieran en la provincia de Dundgovi, mientras que un niño de 5 años falleció en la de Arkhangai.

Además, los equipos de rescate del país han encontrado a 467 personas con vida de las 548 que desaparecieron sin dejar rastro tras la tormenta y por el momento continúan la búsqueda de las restantes.