Tal día como hoy pero hace 1.600 años se fundó la ciudad de Venecia. Asimismo, es el día escogido por Albaola para presentar su nuevo proyecto. Se trata de un sándolo, un barco tradicional veneciano. El que se está construyendo en Pasaia es del tipo s-ciopon y se dedicaba preferentemente a pescar patos en la laguna sobre la que asienta Venecia.

Saul Hoffmann es de Pavía, aunque ha vivido muchos años en Venecia. Es uno de los aprendices de Aprendiztegi, la escuela internacional de carpintería de ribera que alberga Albaola. Ha explicado que el sándolo se trata de un barco especialmente diseñado para navegar en aguas poco profundas. Por ello, no tiene quilla. Está pensado para que pueda ser dirigido por dos personas, a la valesana, aunque una sola persona puede ser suficiente para manejarlo. Para ello, se utilizan dos remos colocados en una fórcola o tolete y los encargados de hacer que el barco navegue deben estar de pie, en una postura que nos recuerda a la icónica góndola.

Junto a Saul Hoffmann Ioanna Moutousidi, otra alumna de Aprendiztegi, originaria de la ciudad griega de Chalkida (que estuvo bajo dominio veneciano en la Edad Media, cuando adoptó el nombre de Negroponte) han mostrado la manera en la que se navega con el sándolo.

Un barco para cazar

Aunque el modelo que se está construyendo en Albaola es el s-ciopon, el destinado a la caza, Hoffmann ha explicado que en realidad el barco se utilizaba para los usos cotidianos de los venecianos. Además de para cazar, se empleaba para ir al mercado, visitar las playas o transportar mercancías por la ciudad. Era el barco de los pobres frente a la opulenta góndola. Una furgoneta veneciana. Por ello, los remos se pueden sacar de la fórcola, para permitir maniobrar y el sándolo no quedara encallado en las inundadas y estrechas calles venecianas o en algún recodo de la laguna. El nombre de s-ciopon hace referencia al fusil de tres metros que se empleaba para cazar los patos

El sándolo que es está construyendo en Pasaia tiene un nombre que une simbólicamente Venecia con Euskal Herria. Se denominará «Laguna», que en véneto y en italiano hace referencia al ecosistema sobre el se asienta Venecia y que, al igual que la ciudad, ha sido reconocido por la Unesco como patrimonio de la Humanidad. En euskara, el término hace referencia a la amistad.

El barco tiene seis metros de eslora y se ha empleado fundamentalmente el alerce, un tipo de pino similar al abeto. Para las cuadernas se ha escogido el roble. Las fórcolas son de haya, al igual que los remos.

Xabier Agote, presidente de Albaola, ha subrayado la importancia de la recuperación del oficio de carpintería de ribera para que no se pierda el patrimonio marítimo material e inmaterial de nuestra cultura y de muchas otras. Ha recalcado también el intercambio de conocimiento y pasión de los aprendices que dan un valor añadido a la propia escuela, a la que asisten un centenar de alumnos originarios de distintos países.

Dominio veneciano del mar

Xabier Alberdi, director de Euskal Itsas Museoa y del departamento de investigación de Albaola, ha subrayado la importancia de Venecia en la historía marítima europea. Fue la heredera de la tradición de navegación de fenicios y griegos que, a su vez, adoptaron los romanos. Tras la caída de Roma, el comercio veneciano supuso un puente entre Oriente y Occidente en el Mediterráneo y un referente de las grandes repúblicas marítimas junto a Génova, Amalfi o Pisa, que construyeron imperios comerciales.

Alberdi ha destacado que Venecia se convirtió en un modelo a imitar y que influyeron incluso en los fueros vascos. De este modo, Gipuzkoa se constituyó como Unión de Repúblicas Independientes, especialmente por el impulso de las localidades costeras, que lograron libertades de relación y comercio. Este fenómeno se repitió en los siglos XI y XII en todas las cortes europeas. 

Apertura de Albeola

La construcción del ‘Laguna’, junto al resto de atractivos de Albaola podrán visitarse durante la Semana Santa y los sábados de abril. A las dificultades generales de la pandemia, Albaola está teniendo que hacer frente a un desprendimiento en la ladera de Ulia que impide el acceso a pie desde San Pedro. Está previsto que el Ayuntamiento de Pasaia comience unas obras con una duración estimada de cuatro meses para solucionar el problema, a pesar de que la actuación no es de su competencia por las características del terreno.

De este modo, la única alternativa es llegar a Albaola en barco desde Trintxerpe, lo que no deja de tener su atractivo. Para poder hacerlo hay que reservar en Albaola por teléfono.