El pasado martes 13, entró en el registro del Parlamento de Gasteiz un escrito del sindicato ErNE dirigido a la «excelentísima presidenta», Bakartxo Tejeria, en el que, tras la publicación en NAIZ de la información «Los ertzainas heridos en las cargas de Tubacex, leves y con lesiones superficiales», basada en los partes médicos remitidos por el Gobierno a la Cámara, le pide que proceda a «esclarecer los hechos relatados, investigar lo sucedido y, en su caso, adoptar las medidas que correspondan para depurar las responsabilidades de las instituciones o personas implicada».

Según difundió en su momento el sindicato policial, un escrito similar ha sido remitido también al vicelehendakari primero y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, con el mismo objetivo.

En su escrito, ErNE reconoce que en la información «aparecen borrados los datos relativos al NIP, DNI y nombre y apellidos» de los agentes de la Ertzaintza, pero sostiene que hay otros datos relativos a la salud y económico-laborales de los agentes lesionados que debieran haber sido protegidos.

En todo caso, el sindicato quiere saber si esos datos «figuraban o no en los documentos remitidos por el Departamento al Parlamento y, en su caso, en qué momento y por qué persona fueron eliminados o borrados, a fin de averiguar también cuántas personas han podido tener acceso a dichos datos». Exige que sean «identificadas todas ellas, a fin de esclarecer la trascendencia que haya podido tener la divulgación de esta información y depurar, en su caso, las responsabilidades de toda índole que puedan derivarse de semejante actuación».

Llama la atención que en el escrito registrado por ErNE en el Parlamento, además de la noticia de NAIZ, se incluya también una copia de todos y cada uno de los 16 partes de lesiones, de los que ya dispone la Cámara y que el sindicato ha podido exponer a la vista de más funcionarios de los que ya lo habían podido ver.

Precedente autorizado

En el escrito dirigido a la presidenta del Parlamento, Bakartxo Tejeria, el secretario general de ErNE, Roberto Feijó, asegura que «se reserva el derecho de poner esos hechos en conocimiento de la Agencia Española de Protección de Datos, a fin de que se investiguen en profundidad por si de los mismos pudiera derivarse algún tipo de responsabilidad, ya sea de la propia administración o de alguno de sus funcionarios».

La referencia a dirigirse a la Agencia Española de Protección de Datos quizá se deba a que en 2015 la Agencia Vasca de Protección de Datos ya autorizó el envío al Parlamento de partes de lesiones de ertzainas lesionados durante una carga policial y, de hecho, están publicados en la web de la Cámara Autonómica.

La Agencia Vasca determinó que el Departamento de Seguridad debía enviar esos partes, borrando de ellos los datos que permitan identificar a cada uno de los agentes, es decir,  una vez disociados esos datos, no afecta a la protección personal. El artículo 11.6 de la Ley Orgánica de Protección de Datos establece en su artículo 11.6 que «si la comunicación se efectúa previo procedimiento de disociación» no sería aplicable la normativa de protección de datos.

Denuncia de Esan

Por la publicación de las lesiones de los ertzainas que participaron en la carga contra los trabajadores de Tubacex del 23 de febrero, otro sindicato, Esan, anunció que lo denunciaría ante la Fiscalía, por un posible delito de revelación de secretos.

NAIZ publicó el pasado 7 de abril que todos los ertzainas heridos en la carga del 23 de febrero contra los trabajadores de Tubacex tuvieron tan solo  heridas leves y daños superficiales. Solo 2 de los 16 se vieron formados a coger la baja laboral y no fue por golpes sino que se lesionaron.